El diálogo entre Uruguay y Argentina se desvanece

| Tensión. El conflicto por Botnia se apoderó de la reunión

Compartir esta noticia

El cruce entre Uruguay y Argentina tensionó ayer la Cumbre de Rio. Al reclamo del canciller Reinaldo Gargano por el bloqueo, siguió una dura réplica de su homólogo argentino. Otra vez el diálogo parece esfumarse.

El clima se calentó durante la reunión de cancilleres y ministros de Economía del Mercosur, a la que el ministro Danilo Astori no asistió. En ese ámbito Gargano volvió a poner sobre la mesa el reclamo por el bloqueo de rutas y puentes. Como respuesta el argentino Jorge Taiana sostuvo que Uruguay no tiene verdadera voluntad de hallar una salida al conflicto.

Brasil volvió a mirar para el costado y optó por no tomar partido en el diferendo. Fuentes de la delegación uruguaya que estuvieron durante el tenso encuentro dijeron que ninguno de los participantes se expidió en torno al tema.

Por lo pronto, el entredicho derivó en que el canciller Gargano no estuvo para la foto oficial de la reunión. Pero más allá de la "foto de familia" la posibilidad de que al menos los cancilleres del Plata se reunieran parece definitivamente alejada.

Cabe recordar que el presidente Tabaré Vázquez anunció antes de partir a Rio de Janeiro que no habría diálogo mientras estén los puentes cortados.

A cuatro días del pronunciamiento de la Corte Internacional de Justicia sobre el pedido de medidas cautelares formulado por Uruguay, la distancia entre ambos países vuelve a ensancharse nuevamente.

RECLAMO. Gargano habló del incumplimiento del laudo del Tribunal Arbitral del Mercosur por parte de la República Argentina. También dijo, durante la reunión plenaria de ministros, que Argentina continuaba incumpliendo otros laudos, como es el caso del ingreso de neumáticos y bicicletas uruguayas. Según relató más tarde el propio Gargano por vía telefónica al presidente Vázquez, todos los miembros del bloque coincidieron en que la situación entre los dos países "le hace mal al Mercosur".

La respuesta del canciller Taiana no se hizo esperar. "El gobierno de Uruguay no ha demostrado voluntad real de diálogo ni de solucionar la controversia por las pasteras, ni de respetar el Tratado del Río Uruguay", sentenció.

Y aún fue más lejos. "El gobierno uruguayo dice que no dialoga por los cortes, pero cuando no había cortes se negó al diálogo que había propuesto el presidente (Néstor) Kirchner", sostuvo. Aquí Taiana aludía al encuentro de ambos mandatarios en Santiago de Chile el 11 de marzo del año pasado. Por entonces, ambos gobiernos habían avanzado en la redacción de una fórmula de acuerdo, pero la negativa de Botnia en detener las obras por 90 días como pedía el gobierno argentino, hizo naufragar también esta fórmula.

Por su parte, el subsecretario de Integración Económica de la Cancillería argentina, Eduardo Sigal, reconoció que había existido un enfrentamiento entre ambas delegaciones. "Ha habido una discusión importante que ha planteado Uruguay sobre el tema de los cortes de ruta, que por supuesto fue respondido por la Argentina planteando básicamente el origen del conflicto, que es la violación del Tratado del Río Uruguay", fue el punto de vista de Sigal.

En este escenario llegó anoche el presidente uruguayo, acompañado del ministro de Economía, Danilo Astori. El propósito de Vázquez es el de participar exclusivamente de la reunión de dos horas que los presidentes tienen previsto celebrar hoy.

La fugaz participación de Vázquez en las reuniones de la Cumbre es interpretada como una clara señal del malestar uruguayo con la marcha del Mercosur. Si bien mucho de este malestar está cruzado por la cada vez más tensa relación bilateral con Argentina, otros aspectos de la integración y, particularmente, la actitud de Brasil, ausente durante toda la evolución del conflicto, han colocado a Uruguay en una situación cada vez más compleja en el tablero regional.

Asambleístas más firmes en bloqueo

Los asambleístas cobraron fuerza luego que el gobierno provincial anunciara que no los desalojaría por la fuerza, si la Corte falla en favor de Uruguay. "Argentina podrá acatar el fallo de La Haya, pero para sacarnos de la ruta, tendrán que desalojarnos por la fuerza", dijo a El País el asambleísta Jorge Fritzler. El representante del ala dura de la Asamblea fue muy ilustrativo al agregar que "no nos bajamos (de la ruta) hasta que se vaya Botnia y la consigna de que el corte no lo levanta nadie, es de todo el pueblo de Gualeguaychú". La Asamblea prepara un nuevo intento de bloqueo a la terminal de Buquebús, aunque con más gente que en la otra ocasión.

No hay propuesta que valga

La reunión entre el enviado de la corona española, Juan Antonio Yáñez Barnuevo, y los ejecutivos de Botnia en Finlandia trascendió hace pocos días. Durante dicho encuentro la empresa expresó su voluntad de colaborar en hallar una salida al conflicto. De acuerdo con las versiones conocidas de esta reunión, se discutió la posibilidad de construir un acueducto y crear una isla artificial para disminuir el "impacto visual" sobre la costa del balneario Ñandubaysal, en la orilla argentina del río Uruguay. La posibilidad de algún tipo de compensación económica a Gualeguaychú es, extraoficialmente, manejada por el diplomático español. Sin embargo esta posibilidad también es rechazada tanto por los asambleístas, como por representantes de la ciudad entrerriana, que sólo admiten el retiro de Botnia. En tal sentido, el presidente de la Corporación del Desarrollo de Gualeguaychú, Enrique Castiglioni, dijo a la emisora local Radio Máxima que rechazaba cualquier tipo de compensación de este carácter. "La salud no tiene precio, acá está la vida de por medio. Hay que ser muy firmes y muy claros en este sentido", sostuvo Castiglioni. La institución representa a unas 30 entidades locales.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar