1/1: Botnia tapa nacional 20070327 300x277 (Botnia)

R. ROSSELLO / D. ROJAS

Los asambleístas están enfurecidos. Hablan de "guerra pacífica", cierre de fronteras, corte de suministro de gas y fibra óptica. Los anuncios de Botnia parecen haber encendido una mecha en Gualeguaychú.

Pocas horas después de los anuncios hechos en el NH Columbia, comenzaron las reacciones al otro lado del río. Por lo pronto, el bloqueo total anunciado para Semana Santa es sólo un paso en lo que los activistas más duros ya proponen como una escalada.

Poco después de conoci- dos los anuncios de Botnia, el asambleísta Daniel Pérez Molemberg confirmó al diario digital Perfil.com que habrá un bloqueo total en Semana Santa. "Aumentará la presión social para que se vea que de parte de la sociedad esta lucha no tiene retorno y que hay disposición para la guerra pacífica", aseguró el activista.

La furia alcanzó incluso a miembros de la Asamblea que han sustentado posiciones más moderadas, como es el caso de la abogada Ana María Angelini. "Si bien sabemos que Tabaré Vázquez se ha negado y se niega reiteradamente a dialogar, es necesario que el Gobierno nacional aplique más fuerza para poder llegar a una solución definitiva de este conflicto", opinó Angelini, una abogada que junto a otros tres colegas planteó su renuncia al trabajo en la Cancillería cuando la Asamblea se negó a cambiar su decisión de ir al corte ininterrumpido.

Por su parte, el asambleísta Jorge Fritzler dijo a El País que sin duda se endurecerían las medidas de aquí a septiembre, mes en el que Botnia concluiría sus pruebas y la planta quedaría en condiciones de comenzar a producir celulosa. El menú de opciones manejado por la Asamblea incluye una serie de duros reclamos al gobierno argentino: cierre de fronteras con Uruguay, suspensión de todos los proyectos conjuntos entre ambos países, corte del suministro de gas y fibra óptica.

Desde Uruguay se observa con preocupación estas declaraciones, mientras se prepara la primera ronda de diálogo en Madrid.

enardecidos. "Si el conflicto sigue y se agudiza, habrá que tomar alguna determinación de parte de los gobiernos uruguayo, argentino y finlandés, porque esto va a ser un conflicto eterno, que puede salirse de cauce y escapar de las manos a lo que es la Asamblea y el gobierno", advirtió Fritzler.

La posibilidad de escenarios más violentos para este conflicto ha sido recurrente durante la evolución del mismo. Hace só-lo pocos días atrás uno de los coordinadores de la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú, José Pouler, había declarado a El País que era muy posible que se formaran grupos más radicales "por fuera de la asamblea" y capaces de tomar acciones más abiertas contra Uruguay.

El lenguaje de algunos asambleístas y de algunos medios que apoyan decididamente la lucha subió algunos decibeles en las últimas horas. "Co-mo si no existiera un histórico conflicto binacional, los finlandeses y los uruguayos pronorteamericanos hacen anuncios pomposos", comenzaba un boletín de Radio Máxima de Gualeguaychú al dar cuenta en las primeras horas de ayer de los anuncios de Botnia.

En los representantes más radicales de la Asamblea, el tono adquiere ribetes beligerantes. "Ante la negativa evidente al diálogo de parte del presidente Tabaré Vázquez, habrá que tomar las cosas de otra forma. Nuestro gobierno tendrá que defendernos y el de ustedes, a ustedes. Si tienen que enfrentarse, bueno tendrán que enfrentarse, pero no podemos seguir como amiguisímos para ir donde quiere Botnia", sostuvo Fritzler durante el contacto telefónico con El País (ver nota aparte).

medidas. En lo inmediato, los asambleístas se proponen "responder" a los anuncios con un nuevo "escrache" ante la Embajada de Finlandia.

Sin embargo, la medida que concentra más atención por estos días es la realización de la marcha del 29 de abril próximo, que conmemora el segundo aniversario de la concentración sobre el puente General San Martín. Este año, con el apoyo de los otros grupos de Entre Ríos, así como de las asambleas de Buenos Aires y la CGT, los activistas aspiran a reunir a unas 250 mil personas sobre la cabecera argentina del puente y romper así sus propios récords de movilización.

A modo de "medida espejo" de los monitoreos que viene realizando Uruguay de las aguas del río, Argentina hará un estudio epidemiológico de la población de Gualeguaychú. El estudio fue pedido por la Asamblea Ambiental al Ministerio de Salud de la Nación, y ayer el ministro Ginés González García se comprometió públicamente a llevarlos a cabo.

"Nos parece una buena medida de seguridad, porque si no uno puede echar la culpa a cualquier cosa que pase", respondió González García ante una consulta de la agencia entrerriana APF.

El estudio fue solicitado por carta por la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú, que lo presentó como una "medida cautelar" para contrastarlo con futuros chequeos, una vez que la planta de Botnia esté funcionando. El titular de Salud advirtió, empero, que el estudio "no es fácil de hacer", pero agregó que "estamos trabajando para hacerlo junto con la Dirección de Epidemiología de la provincia (de Entre Ríos)". La medida había sido solicitada a la Justicia local, pero ésta no le dio curso hasta el momento.