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Los islamistas de Hamas que gobiernan la Franja de Gaza dijeron hoy que se pusieron en contacto con diversos grupos armados en su territorio costero para evitar que ataquen a Israel, ocasionando represalias del estado judío.

Una serie de recientes ataques palestinos con cohetes contra el sur de Israel y los bombardeos de represalia del estado judío han aumentado las tensiones en la zona. A primeras horas del viernes, la aviación israelí atacó múltiples objetivos en Gaza tras caer un cohete la víspera en el sur de Israel.

El doctor Moaiya Hassanain, del servicio de sanidad de Gaza, dijo que tres niños palestinos resultaron heridos en uno de los bombardeos y fueron hospitalizados.

El alto mando israelí dijo que su aviación atacó dos fábricas dedicadas a la producción de armamento y dos polvorines. Los funcionarios de seguridad de Hamas reconoció que fueron atacados 10 objetivos: una fábrica de quesos, un estudio cinematográfico construido por Hamas y descampados en los que se entrenan los milicianos.

Una declaración difundida por el gobierno de Hamas tras los ataques acusó a Israel de lanzar una "escalada" bélica contra Gaza. Empero, aclaró que el gobierno de Hamas se puso "en contacto con las diferentes facciones para salvaguardar el acuerdo interno".

Hamas nunca ha criticado explícitamente los ataques contra Israel, aunque sus mandos reconocieron que dichos ataques no ayudan a los intereses palestinos en estos momentos. La declaración del viernes indicó que el grupo islámico intenta que otras facciones islamistas del territorio respeten esta política.

Algunos residentes de Gaza han criticado a Hamas —cuya carta fundacional pide la destrucción de Israel— por intentar limitar los ataques con cohetes contra el estado judío.

El año pasado, Israel lanzó una campaña en Gaza tras aguantar años de ataques islamistas con cohetes. Hamas ha intentado evitar provocar las represalias militares israelíes.

AP