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"Si hay algo que no vamos a perder es la esperanza", anotó ayer en su página de Facebook el buzo Héctor Bado, durante la pausa en las operaciones de búsqueda del avión de Air Class.

Las operaciones que el célebre rescatista lleva adelante con apoyo de la Armada Nacional, están suspendidas por razones meteorológicas al menos hasta mañana. En sus entradas más recientes Bado relató sus primeras impresiones sobre el trabajo y dio cuenta de un inesperado hallazgo de carácter arqueológico, la especialidad a la que se ha dedicado de lleno.

PRIMERA ETAPA. "Falta mucho por recorrer todavía. Lo imposible se va a hacer, no tengan dudas. Si los puntos que estamos manejando son medianamente correctos tiene que aparecer, ayer logramos, para que tengan una idea, ver un cable submarino telegráfico del siglo XIX de 30 centímetros de diámetro además de otras cosas pequeñas, como las marcas que dejan las redes de los pesqueros en el fondo, incluso lo que parece ser un naufragio muy antiguo, si le pasamos bien no hay forma de que no lo veamos, además estamos superponiendo las calles en un 50%, por lo que el sonar y el software no dejan en ningún momento puntos ciegos. Lamentablemente, lo que pudimos hacer ayer es totalmente descartable por las condiciones, hay que volver a hacerlo, así son las cosas en estas búsquedas, uno propone pero los imponderables disponen".

Esta fue una de las últimas entradas a su página en la red social, a la que adjuntó varias fotos tomadas durante la exploración alrededor de la Isla de Flores. Las imágenes muestran el buque guardacostas ROU 12 Paysandú, el aparato de sonar de barrido lateral, al propio Bado con los otros tres integrantes de su equipo, y al buzo junto a las ruinas de las antiguas instalaciones del lazareto, entre otras.

Bado se mantiene optimista pese a las dificultades que ha enfrentado en apenas dos días de exploración. Entre los "imponderables" que contó se encuentra la presencia de buques pesqueros en un área muy cercana a la de búsqueda. Ello provocó distorsiones en las lecturas del sonar, según confió Bado a El País.

De todos modos, el buzo se muestra confiado en superar estos obstáculos y continuar las operaciones hasta dar con la aeronave.

"Estamos con las esperanzas intactas y deseando retomar la búsqueda apenas se nos indique. Los equipos funcionaron a la perfección. La gente de la Paysandú espectacular, le gente del Flores igual, todo encaminado", anotó.