Los amantes de la mitología nórdica se sentirán como en casa: “Es bueno verte, viajero. Toma un juego y siéntate. Ya viene el chocolate”, es lo primero que se lee en el sitio web de este rincón montevideano que promete una merienda para viajar en el tiempo.

Nudo escudo, un espacio que combina a la experiencia en una taberna medieval con un ambiente lúdico y un buen chocolate caliente, está en la esquina de Jackson y Charrúa. Esta propuesta es punto de encuentro para grandes y chicos, que se completa con productos artesanales que prometen meriendas con un marco nórdico: hay juegos de mesa y una decoración en la que no faltan escudos, hachas, pieles y madera.

Iván y Estefanía son una joven pareja que el año pasado dio vida a este proyecto: cada vez que viajaban, volvían a Montevideo notando que aquí no encontraban el chocolate caliente que les gustaba. Ese fue el puntapié inicial para comenzar a soñar con un lugar en el que unieran esa y otras pasiones que tenían.

“Una de las ideas principales surgió así, a través de viajes y experiencias de haber tomado chocolate caliente como el que hay en tantos lugares, España, por ejemplo, pero acá no, no era el mismo”, contó Iván.

Él es profesor de Educación Física, ella da clases de danza árabe, pero en pandemia, como le ocurrió a tantas personas, tuvieron algo más de tiempo para pensar en tener su propia chocolatería. “Empezamos a vincular cosas que nos gustaban y una cosa llevó a la otra. Lo del chocolate, tener uno como el que acá no encontrábamos, fue lo primero. Pero también le sumamos que nos gustan los juegos de mesa, entonces seguimos tirando una lluvia de ideas, entre la que estaba algo relacionado a la mitología nórdica, que nos encanta”, señaló Estefanía.

No solo las pieles, los muebles o los escudos que decoran el lugar hacen a la experiencia: además de ofrecer preparaciones dulces y saladas para acompañar el café y el chocolate (que casi siempre sale con un clásico, los churros), también tienen productos con un toque “nórdico” como cerveza artesanal y el hidromiel, ambas bebidas hechas por integrantes de “clanes” uruguayos como Vuelo de Cuervos, Clan Valhall y Valherjes Cruachan, que son hermandades con el interés en común de la mitología nórdica.

El hidromiel “es la bebida alcohólica más antigua de la humanidad”, explicó Charly Siecola, su creador, y subrayó que es nada menos que el antecesor de los vinos y las cervezas. Al ser elaborada artesanalmente y con ingredientes naturales, el nivel alcohólico de esta bebida puede variar.

En su caso, la elabora para que resulte con un 11% de alcohol: “La hago de forma natural, respetando las formas de elaboración antiguas, en las que no se agregaba químicos ni levadura”, señaló.

El hidromiel que hace Charly puede conseguirse en Nudo Escudo, también hacen envíos y suele estar en los encuentros temáticos como la Feria Medieval que se realizará en Rocha en los próximos días. Su creador detalló que se puede beberse frío, tibio o caliente.

En cuanto a la cerveza, Nudo Escudo ofrece la que hace Guillermo Delgado, integrante del Clan Valhall. Dentro de las hermandades todos tienen sus roles, explicó, y en tres grandes líneas, éstos se ubican dentro de los que se dedican a la historia, a la parte espiritual y a la recreación. El rol del cervecero en esa última área, lo asumió él, que produce cervezas desde hace varios años.

“Hago distintos estilos de cerveza, dependiendo la estación del año”, dijo, diferenciando entre la cerveza casera, la artesanal y la industrial. “Cada una tiene sus características, son ricas todas y está bueno que todas existan. Hay un mundo entre los distintos tipos de cerveza, yo soy cervecero casero, hago también fermentos como hidromiel, y veo esto como un regalo ancestral”, sostuvo.

El escudo que da nombre al local y que se exhibe en su logo e incluso ocupa una de las paredes interiores, es un símbolo de familia, de comunidad.

“Viene gente de todas las edades, tenemos clientes de más de 60 años y otros más jóvenes que llegan en grupos de amigos, duplas o familias con hijos,”, sostuvo Iván.

La pareja detalló que tienen juegos de tres categorías: party game, ameri game, y euro game. “Los primeros son juegos cortos, las partidas no duran más de 15 o 20 minutos. Los segundos ya tienen partidas un poquito más largas, con reglas más desarrolladas, pero no son extremadamente difíciles. Los terceros si, son más complejos y podés estar toda la tarde jugando”, explicó Iván.

Los clientes pueden asesorarse con los anfitriones tanto para elegir alguno de los juegos de mesa, como para sacarse dudas de las reglas. También tienen la posibilidad de llevarse alguno a casa, ya que además la tienda del lugar los vende.

Nudo escudo abre de jueves a domingo de 16.30 a 20.30 horas. A la atención habitual, la casa suma eventos puntuales, como charlas temáticas, encuentros de juegos y música. No es necesario reservar mesa, pero es aconsejable hacerlo para asegurarse un lugar a través de su sitio web o Instagram.

El fin de semana del 7 y 8 de octubre se realizará una nueva edición de la Feria Medieval Uruguay, esta vez en los jardines del Fortín de San Miguel, Chuy, Rocha.

El encuentro será un viaje en el tiempo para remontarse hacia el enigmático pasado medieval, y se realizará en el marco del Día del Patrimonio. Como si fuera poco, los visitantes de la feria podrán recorrer el circuito del Fuerte de San Miguel y la Fortaleza de Santa Teresa.

Los visitantes podrán disfrutar de un mercado medieval que consiste en una ambientada feria artesanal con materiales nobles y oficios de la época en vivo con hilanderas, forjadores, joyeros y alfareros, asombrosas actividades

temáticas al aire libre. Habrá propuestas participativas, como por ejemplo la de la Arquería Los Fogones. También estarán presentes las lecturas de oráculos vikingos, variada gastronomía que sorprenderá con propuestas típicas del medio evo y deliciosas pócimas, música celta itinerante y momentos para celebrar bailando, junto a las impactantes producciones y recreacionismo histórico de los clanes medievales uruguayos Vuelo de Cuervos, Clan Valhall y Valherjes Cruachan con clanes especialmente invitados de Brasil.

La entrada por jornada es de $100 más un alimento no perecedero. Niños menores de 10 años no pagan.

La Feria Medieval cuenta con declaratoria de interés turístico por el Ministerio de Turismo y de interés departamental por el Gobierno de Rocha.