María Camila Salas/El Tiempo GDA
El insomnio afecta a muchas personas y puede estar relacionado con bajos niveles de melatonina, la hormona que regula el ciclo de sueño y vigilia. Algunos alimentos pueden estimular su producción de forma natural, favoreciendo un descanso más profundo y reparador.
Su producción alcanza su punto máximo durante la noche y disminuye con la luz del día. Para quienes buscan mejorar su descanso nocturno, existe una fruta que puede contribuir a ese propósito.
Las cerezas y su impacto en el sueño
Investigaciones señalan que el consumo de cerezas puede favorecer un descanso prolongado y continuo. Esta fruta contiene varios elementos que ayudan a mejorar la calidad del sueño:
- Posee antioxidantes que contribuyen a reducir la inflamación y facilitar el descanso.
- Aporta vitamina A, vitamina C y magnesio.
- Disminuye la cantidad de veces que una persona se despierta durante la noche.

Formas recomendadas de consumo
Para aprovechar sus propiedades, se pueden incluir en la alimentación de diversas maneras:
- Ingerir cerezas frescas entre una y dos horas antes de acostarse.
- Tomar un vaso de jugo de cereza ácida o guinda dos veces al día, por la mañana y en la noche.
- Comer cerezas secas como merienda antes de dormir.
- Incorporarlas en la cena, ya sea en una ensalada de frutas, mezcladas con yogur natural o en un postre sin azúcares añadidos.
Se recomienda incorporar esta fruta de manera gradual y, si se observan efectos positivos, aumentar la cantidad de manera progresiva. Otras frutas que pueden favorecer el descanso incluyen las bananas, el kiwi, el maracuyá y las frutillas.
Otros efectos positivos de las cerezas
De acuerdo con información de la Clínica de Cleveland en Estados Unidos, las cerezas también pueden aportar otros beneficios para la salud, tales como:
- Disminuir el dolor muscular.
- Reducir la inflamación en el organismo.
- Contribuir al funcionamiento del cerebro.
- Fortalecer el sistema inmunológico.
- Ayudar en el control del peso.
- Brindar protección al corazón y al sistema cardiovascular.