FIESTAS JUDÍAS

Reflexiones de Pesaj: qué podemos aprender de esta festividad judía que celebra la libertad

Rabino explica qué se recuerda en las pascuas judías y cuáles son los significados de las principales costumbres en esta fecha.

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Cena de Pesaj
Séder de Pesaj.
Foto: Freepik.

Por Tatiana Scherz Brener

En la noche de hoy, familias judías de todo el mundo se reunirán para celebrar Pesaj, festividad que recuerda la liberación del pueblo hebreo de la esclavitud en Egipto hace 3.335 años. Sin embargo, esta fecha no solo sirve para mirar hacia el pasado, sino que también nos invita a preguntarnos: ¿Qué nos esclaviza hoy en día?

El tiempo de nuestra liberación.

La celebración también lleva el nombre de Zmán Jeroteinu, que se traduce como ‘el tiempo de nuestra liberación’. El Rabino Mendel Shemtov aprovecha esta ocasión para reflexionar sobre qué entendemos por libertad.

“La verdadera libertad está en ser quien uno es”, aseguró. No es una cuestión física: “Uno puede estar encerrado detrás de una muralla, pero vivir su vida con propósito, mientras que otro tal vez tiene la posibilidad de hacer lo que quiere, pero está limitado por sus propios miedos y prejuicios”.

En este sentido, afirmó: “Los ‘no puedo’ y el ‘qué dirán’ nos auto limitan y son el enemigo más grande de nuestra libertad”.

Pesaj funciona como un llamado de atención. “Ya no estamos en Egipto y ningún faraón nos está oprimiendo ni esclavizando, pero seguimos teniendo ‘faraones interiores’ que nos limitan”, expresó Shemtov. De esta manera, la tradición da lugar a un proceso de introspección para que cada persona pueda tomar consciencia de qué miedos no le permiten cumplir con su propósito de vida.

“El primer paso hacia la libertad es darnos cuenta de cuáles son las creencias que nos atan. El segundo es reconocer que tenemos la capacidad de liberarnos de ese ‘faraón interior’. Y el tercer paso es tomar las decisiones necesarias para salir de nuestro propio Egipto”, puntualizó.

Matzá en Carcel Punta de Rieles.png
Rabino Mendel Shemtov entregando matzá en la Carcel Punta de Rieles.
Foto: Mendel Shemtov.

Costumbres de Pesaj.

La parte de reflexión viene acompañada de ciertos mandatos —mitzvot— que hacen a la festividad, como contar la historia de los hebreos en Egipto y comer matzá, una galleta que se hace con harina y agua, y se cocina sin leudar. En primer lugar, es una manera de recordar cómo fue la salida de la esclavitud: “Dios nos sacó con mucha prisa de Egipto y no hubo tiempo para preparar pan, entonces se hizo matzá”, expuso el rabino.

En segundo lugar, esta galleta representa la humildad. “Se la conoce como el pan humilde porque, a diferencia del pan que sí logra inflarse, la matzá no tiene ego, no se infla”, señaló Shemtov. Esto quiere decir que, para acceder a la libertad, la clave está en ser humilde. “Si soy orgulloso y arrogante, no puedo aprender de los otros ni recibir ayuda, pero cuando tengo humildad puedo conectarme con el prójimo y liberarme de mi faraón interior”, sostuvo.

Asimismo, el rabino mencionó: “Pesaj nos enseña que cuando tenemos la oportunidad de liberarnos y cumplir con nuestro propósito, no hay que dejarla pasar. No dejes que fermente, que leude, sino hacelo enseguida”.

Otra costumbre de la festividad es comer hierbas amargas; en hebreo, maror. Éstas representan la esclavitud y la opresión vivida en Egipto. “Recordar de dónde venimos es importante porque eso nos mantiene humildes y centrados en hacia dónde vamos”, dijo Shemtov. Y agregó: “Ya salimos de Egipto, pero hay que seguir superándonos cada día. Cada día hay que salir de nuestro Egipto personal”.

Además, esta tradición invita a empatizar con las situaciones de amargura que otras personas están viviendo actualmente, indicó.

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Tzvi Shemtov con matzá hecha a mano.
Foto: Rabino Mendel Shemtov.

Año de reunión.

Para la tradición judía, cada año tiene un sentido particular. Según el calendario hebreo estamos en el año 5.783 y lleva el nombre de hakhel, que conceptualmente quiere decir ‘año de reunión’. De esta manera, nos impulsa a buscar oportunidades en las que podamos unirnos con otros.

El Rebe de Lubavitch, Rabí Menajem Mendel Schneerson, fue portavoz del movimiento jasídico Jabad-Lubavitch desde 1950 hasta su fallecimiento en 1994. “Él nos instruyó a aprovechar este año para generar encuentros que nos hagan crecer como personas, en nuestra relación con el prójimo y en nuestra relación con Dios”, comentó Shemtov.

Por eso, este año, el banquete de Pesaj —denominado séder— adquiere un toque especial: “Es una oportunidad para pensar en el prójimo y expandir la mesa, expandir los valores y expandir la vivencia de esta festividad con una persona más”.

Matzá para todo el país.
Este equipo recorrió todo el país para entregar matzá hecha a mano a todas las familias judías que lo necesitaban.
Foto: Mendel Shemtov.

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