La Ruta del Queso de Colonia invita a conocer la región quesera por excelencia de Uruguay, con una propuesta que une historia, tradición, innovación y una experiencia sensorial única.

Esta ruta recorre varios rincones del departamento, abarcando queserías artesanales pequeñas y llegando a otras industriales, puntos de venta especializados y operadores de servicios turísticos, todo en un entorno que combina lo rural con lo urbano, desde Nueva Helvecia hasta Colonia del Sacramento.

La tradición quesera en Colonia se remonta al siglo XIX, con la llegada de colonos europeos que trajeron sus técnicas de elaboración y crearon lo que hoy conocemos como el amado y famoso “Queso Colonia”.

Desde entonces, la producción de queso ha sido un pilar fundamental en la identidad cultural y económica del departamento. “Esta idea surgió por el año 1994 aproximadamente, cuando un grupo de gente de la zona este de Colonia que estaba trabajando en diversos temas propuso la creación de una ruta turística del queso”, contó Cristian Pos, coordinador del Centro Pyme de Colonia.

A pesar de haber nacido en los ´90, la idea tomó fuerza en distintas etapas y, en mayo de 2023, varias empresas vinculadas al turismo y la producción de queso decidieron llevar adelante un proyecto concreto.

A partir de allí, la Asociación Turística de Colonia encargó al Centro Pyme de Colonia la elaboración de un plan de trabajo. Este plan incluyó capacitaciones en asociativismo, consultorías de diseño de experiencia turística y visitas individuales a las empresas participantes para ajustar detalles en la gestión empresarial y turística. Según Pos, “hubo un cambio de enfoque importante: el foco no estaba en el queso, sino en el turista y cómo crear un producto que partiera de sus necesidades”.

Así, el enfoque de la Ruta del Queso va más allá de ser un simple recorrido de un punto a otro. “La idea es que uno pueda tener más que una ruta con lugares claros para ir, es que haya un menú donde uno pueda elegir qué experiencia quiere vivir”, explica.

Las opciones van desde visitar pequeñas queserías domiciliarias, donde se elaboran quesos en el fondo de las casas, hasta conocer instalaciones más grandes y especializadas. Cada parada ofrece una propuesta única, ya sea por el tipo de queso, el método de producción o su historia.

Esto permite a los visitantes sumergirse en la cultura local, conocer a las familias productoras y entender su legado. “Es una auténtica experiencia turística en el sentido de que es muy sensorial y emocional. Las agencias de viaje que visitaron la ruta recientemente mencionaron que hacía mucho que no veían algo tan auténtico, porque son las mismas familias, los dueños quienes atienden y quienes comparten lo que hacen”, comentó.

La ruta también ofrece degustaciones, catas, maridajes con productos locales y visitas guiadas que enseñan sobre técnicas de elaboración y producción sustentable, promoviendo también la agroecología. “Cada lugar tiene su particularidad, no hay dos sitios iguales; cada uno tiene un queso o una receta única”, añadió Pos.

Tras varias etapas de planificación y pruebas desde 1994, en 2023, el proyecto fue revitalizado gracias a la colaboración entre distintas entidades públicas y privadas, como la Intendencia de Colonia, el Ministerio de Turismo, el Centro Pyme de Colonia, la Agencia de Desarrollo Económico del Este, entre otros. “Este relanzamiento se logró gracias al trabajo conjunto de más de 25 actores vinculados al turismo y la producción de queso. Realizamos un recorrido con agencias de viaje de Montevideo, lo que permitió que muchas de ellas descubrieran el potencial de la ruta para diferentes tipos de público”, contó el director del centro Pyme de Colonia.

Este proceso culminó en la presentación oficial de la marca “Ruta del Queso”, un paso fundamental para consolidar su identidad y promoción a nivel nacional e internacional. Sin embargo, aún hay desafíos por delante, como mejorar la presencia digital y la comercialización de la ruta, así como la sensibilización de la comunidad local para integrar a todos en esta iniciativa, agregó.

El espíritu colaborativo ha sido un factor clave en el desarrollo de la Ruta del Queso. “La cooperación entre todos es más fuerte que la competencia, porque individualmente no tendrían la fuerza que tiene el conjunto”, reflexionó Pos. Y así, esta ruta busca convertirse en un destino atractivo y sostenible, capaz de atraer a visitantes de todo el mundo interesados en vivir una experiencia auténtica, inmersiva y cercana a las raíces culturales de la región.

Por eso, es bastante más que solo un recorrido gastronómico: es una ventana abierta a la historia y la identidad de un departamento, donde las tradiciones se mezclan con la innovación para ofrecer una experiencia inolvidable.

Degustar quesos, recorrer tambos, conocer distintas formas de producción y acercarse a la cultura local son apenas algunas de las múltiples propuestas que esperan a los visitantes.

Quienes abren las puertas a los visitantes y forman parte de esta rica ruta son: Honegger, Centro Emmanuel, establecimiento Nicant, La Cremerie, La Cumbre, Los Criollitos, Vinoteca de la Colonia, La Positiva, Los Fundadores, Landkase, La Vigna, Granja 109, Hotel Mon Petit, Naturalia y Dufau.

Con una oferta variada, flexible y pensada desde la perspectiva del turista, esta ruta se proyecta como un modelo de turismo sostenible y colaborativo, capaz de atraer y cautivar a todo tipo de viajeros.

“Ya hay demanda incipiente y un interés muy grande; lo que necesitamos ahora es apretar el acelerador y preparar a toda la comunidad para lo que viene”, concluyó Pos, anticipando un futuro prometedor para la Ruta del Queso de Colonia.