Se celebran los 70 añosde Alfajores de las Sierras de Minas y ayer se inauguró el Museo del Primer Alfajor del Uruguay. El festejo también incluyó la reinauguración del local comercial de tradicional la fábrica.

Octavio Collins, gerente de ventas de la empresa, contó que maduran esta idea hace varios años. “Ser el primer alfajor del Uruguay y estar celebrando los 70 años nos impulsó para hacerlo realidad, sumado al deseo de compartir con la comunidad nuestra historia, que es también la historia de muchos minuanos. La idea también es que se convierta en un punto de atracción local, para acompañar el crecimiento turístico del departamento”, contó.

El museo está pensado para mostrar la historia de la marca a través del relato de la familia Cedrés: los visitantes podrán ver maquinaria, muebles y documentos de trabajo del fundador, Don Conrado Cedrés Castro.

“El museo cuenta con el mobiliario original, pueden verse las primeras máquinas que la empresa utilizaba para la elaboración, también hay un espacio dedicado a mostrar los implementos del baño a mano de merengue, la envoltura manual de cada pieza y finaliza con una vista del antiguo horno de elaboración”, detalló Collins.

Una de las grandes atracciones del lugar es el gran horno a leña donde originalmente se cocinaban las galletitas de los alfajores: tiene más de 70 años, perteneció a la antigua panadería, cuenta con aproximadamente 30 metros cuadrados y funcionó hasta los años 90.

Luego de siete décadas, los alfajores siguen haciéndose de la misma forma: “La receta en un 99% es la misma, han habido algunos cambios que son imperceptibles para el consumidor. Pero la fórmula es idéntica, es un secreto de la familia, somos guardianes de esa receta. No tiene conservantes ni colorantes, por eso es muy consumido por las personas alérgicas, por ejemplo”, contó Alicia Cedrés, directora de Alfajores de las Sierras de Minas e hija de su fundador, en una nota a El Empresario.

El museo abre sus puertas de lunes a sábado de 8.30 a 12.30 y de 14.30 a 19 horas, la entrada es gratuita y no es necesario hacer reservas. Si bien se recorre sin guía, los visitantes tienen disponible un documental que cuenta la historia del alfajor. Está ubicado en el mismo sitio que la planta de elaboración, con entrada por la calle Carabajal 405, esquina Colón, en la ciudad de Minas, departamento de Lavalleja.

Hace 70 años Don Conrado Cedrés Castro comenzó a escribir la historia de sus famosos alfajores. Carpintero de oficio, Cedrés fue contratado para trabajar en la obra del parador de Salus en Minas, Lavalleja. Allí, conoció a María Nilda, quien unos años después sería su esposa.

Cuando se casaron, se fueron a vivir a Montevideo, pero al tiempo volvieron a tierras minuanas porque las extrañaban.

Luego de pensar qué hacer, compraron una panadería, a pesar de no tener ningún conocimiento del oficio. A prueba y error, crearon varios productos, entre ellos el alfajor bañado de nieve que hoy está cumpliendo siete décadas y es el más famoso del país. El Alfajor Sierras de Minas fue el primer alfajor comercial del Uruguay y, la suya, la primera fábrica de alfajores.