O Globo - GDA
La práctica regular de actividad física es fundamental para mantener la salud en buen estado. Pero un estudio publicado recientemente en la revista científica Obesity mostró que el "cuándo" hacer ejercicio es tan importante como el ejercicio en sí, especialmente cuando se trata de controlar los niveles de azúcar en sangre.
Investigadores de la Universidad de Granada, en España, analizaron datos de 186 adultos con sobrepeso y/o obesidad. Los participantes tenían, en promedio, un IMC de 32,9 y 47 años de edad. Todos usaron un acelerómetro para monitorear el movimiento y un monitor continuo de glucosa durante dos semanas.
El estudio clasificó a las personas "activas" como aquellas que practican entre 21,4 y 42,9 minutos de ejercicio por día, y "muy activas" como aquellas que practican más de 42,9 minutos de ejercicio por día. Los resultados mostraron que los participantes del estudio que realizaron más del 50% de sus ejercicios moderados a vigorosos entre las 18:00 y la medianoche observaron caídas significativas en sus niveles de glucosa en sangre que duraron todo el día, no solo inmediatamente después de concluir el ejercicio.
Alcanzar niveles más bajos de glucosa en sangre es una estrategia importante para ayudar a combatir la diabetes, especialmente en personas con sobrepeso.
“A medida que el campo avanza hacia prescripciones de ejercicios individualizadas para diferentes condiciones crónicas, este estudio ahora proporciona información adicional más allá de simplemente decir a los pacientes que 'se muevan más', sino que se muevan con la mayor frecuencia posible y prioricen el movimiento de la tarde a la noche, cuando sea viable para la regulación de la glucosa”, dijo Renee J. Rogers, científica sénior de la División de Actividad Física y Control de Peso de la Universidad de Kansas, quien no estuvo asociada a la investigación, en un comunicado.
Los hallazgos del nuevo estudio están alineados con investigaciones anteriores que muestran beneficios del ejercicio en determinados horarios del día. Un estudio mostró, por ejemplo, que finalizar una sesión de ejercicios aproximadamente dos horas antes de dormir puede mejorar significativamente el sueño.
Mujeres y hombres
Otro demostró que las mujeres que entrenan por la mañana tienen más probabilidades de perder grasa abdominal y bajar la presión arterial, mientras que el entrenamiento nocturno aumenta la fuerza y la resistencia de la parte superior del cuerpo y puede mejorar el estado de ánimo general.
En el mismo estudio, los hombres que entrenaron por la noche pudieron reducir la presión arterial, quemar más grasa y reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
Huesos
En lo que respecta a la salud ósea, no importa cuándo te ejercites, pero si eliges el mismo horario todos los días, aumentas la probabilidad de mantener los huesos saludables.
“Nuestros resultados destacan la importancia del campo de la prescripción de ejercicios de precisión”, dijo el coautor del estudio Jonatan R. Ruiz. “En la práctica clínica, el personal médico y deportivo certificado debe considerar el horario ideal del día para aumentar la eficacia del ejercicio y los programas de actividad física que prescriben”.