El Tiempo/GDA
Si hubo una actividad que quedó vigente aún después de la pandemia fue el ejercicio en casa, pues las personas se dieron cuenta que con ayuda de elementos cotidianos es posible realizar una buena rutina, sin necesidad de ir al gimnasio. Eso sí: siempre es importante contar con la guía de alguien experto, pues nadie está exento de sufrir ciertas lesiones (aunque sea en casa).

Es así como los ejercicios de cardio y fuerza resultan especialmente atractivos. Sin embargo, los primeros tienen un plus y es que “como su propio nombre indica, buscan un aumento del ritmo cardiaco con el objetivo de acelerar el metabolismo y favorecer la quema de calorías”, contribuyendo así a la pérdida de peso, tal cual indica ‘Men’s Health’.

Ahora, hay que hacer algunas precisiones, pues todo ejercicio en exceso puede ser perjudicial. Por ello los expertos recomiendan solo hacer rutinas cardiovasculares de 10 a 15 minutos, si utiliza el cardio como calentamiento, o de máximo una hora si se trata del entrenamiento completo.

Burpees. Este ejercicio es muy común en el CrossFit, HIIT o en los planes de tonificación, pues permite que todo el cuerpo trabaje y, aunque algunos lo odian, resulta muy efectivo.

Consiste en bajar en posición de sentadilla y luego estirar las piernas a la vez que se apoyan las palmas en el suelo, luego se salta se estiran las piernas y se recogen (sin despegar las manos) para volver a subir.

Hay quienes lo complementan con la famosa ‘tijera’.

Mountain climbers. Como su nombre anuncia, este ejercicio pretende imitar el movimiento que haría un escalador.

Estando en posición de plancha y con los brazos completamente estirados, suba una rodilla hasta el pecho, vuelva a su posición y repita del otro lado.

No solo se trabaja abdomen, sino cintura y pierna también.

Sentadillas con salto. Este combina las tradicionales sentadillas con los saltos entre cada repetición, lo que lo convierte en el ideal a la hora de quemar grasa.

Lo importante es no perder la postura, asegurarse de que las piernas estén a la misma distancia de los hombros y procurar llevar el mismo ritmo.

Sentadillas con mancuernas. Al igual que en el anterior, en esta oportunidad se mezclará un ejercicio clásico con la incorporación de un elemento: las mancuernas. El objetivo es aumentar también la resistencia.

Si no se tienen mancuernas en casa basta con llenar dos botellas de agua de acuerdo al peso soportable.

Salto de cuerda. Por último, el favorito de muchos: los saltos de cuerda. Este ejercicio es mágico, pues con constancia permite ver resultados muy rápido y no requiere mayor complejidad; de hecho, recuerda mucho a la infancia.

Quienes son más expertos optan por hacer saltos cruzados u otras variaciones, pero el tradicional está bien.