El Newcom es un deporte inclusivo -en apariencia similar al voley- que ha transformado la vida de miles de personas mayores en Uruguay. Con raíces en Estados Unidos, pero adaptadoen Argentina para mayores de 60 años, se convirtió en una disciplina que fomenta la salud física, mental y social.
Gracias al impulso de la profesora de educación física Cristina Méndez, el Newcom llegó a Uruguay en 2014 y, desde entonces, no para de crecer.
Reglas
Aunque tiene similitudes con el voleibol, el Newcom se diferencia por su enfoque inclusivo y de cuidado, especialmente para personas mayores:
• Pelota y pases: Se juega con una pelota más liviana, que debe atraparse antes de lanzarla. No se permite golpearla.
• Cancha y equipo: La red tiene una altura de 2,43 metros y los equipos son mixtos, con al menos tres mujeres y un hombre en la cancha.
• Lanzamientos y movimientos: Está prohibido lanzar con una sola mano o caminar más de dos pasos con la pelota. Además, los pases deben realizarse en menos de cuatro segundos.
• Rotación y estrategia: Como en el voleibol, hay rotaciones y posiciones, lo que le agrega una dinámica estratégica a este juego.
“Nos gusta preservar estas reglas porque están pensadas para proteger a las personas mayores. Es un deporte que se parece al vóley, pero no lo es: se llama Newcom porque es otra cosa”, enfatiza Méndez.
Orígenes
El deporte nació en 1895 en Estados Unidos de la mano de Clara Gregory Baer que incentivaba a las mujeres a jugar en un entorno escolar. Décadas más tarde, Argentina lo adaptó para incluirlo como actividad oficial en los Juegos Nacionales Evita en 2008 y lo promovió como ideal para las personas mayores.
“En Uruguay, lo traje en 2014 tras un curso en Argentina. Lo vi jugar y me encantó. Venía del ámbito del vóley y sabía que podía sumar a adultos mayores, especialmente hombres, a la actividad física”, comenta Méndez.
La introducción fue gradual: “Empezamos en Puntas de Valdez, San José, a veces jugando dos contra dos. Pero poco a poco fue creciendo y se extendió a localidades como Rafael Perazza y Libertad”. Hoy, el Newcom se practica en todos los departamentos del país.
Beneficios
El impacto positivo de este deporte en la salud física es notable: mejora capacidades como la fuerza, el equilibrio, la flexibilidad y la coordinación. Pero su alcance va más allá de lo físico. “Muchas personas que dejaron de practicar deporte por lesiones o por su edad, retoman con el Newcom. Otros, que nunca hicieron actividad física, se inician con 60 años o más y no lo dejan”, comenta Méndez.
Además, el Newcom ofrece un fuerte componente social y emocional. “La sociabilización es clave. Muchas personas mayores enfrentan soledad o pérdidas, y este deporte les da un grupo de contención. Ponerse una camiseta, ser parte de un equipo, mejora su autoestima y les da independencia”, explica.
El Newcom no solo les devuelve la vitalidad a los jugadores, sino que también transforma sus vidas: “Es impresionante ver cómo despiertan habilidades dormidas y les cambia la vida. Es mucho más que un deporte”, enfatiza.
Inclusión
Este deporte ha evolucionado para adaptarse a diferentes públicos. Hoy cuenta con categorías para mayores de 40, 50 y 70 años, además de torneos femeninos.
“Es importante que existan espacios tanto recreativos como competitivos. La competencia atrae a muchos, especialmente a varones, pero no perdemos de vista lo recreativo, que es esencial para el bienestar general”, señala Méndez.
La mayoría de las Plazas de Deportes del país ofrece esta actividad con un enfoque comunitario y recreativo.
Parece que el Newcom llegó para quedarse, consolidándose como un deporte que no solo promueve la salud física, sino que también construye comunidad y transforma vidas. Con la participación de cientos de jugadores se sigue escribiendo una historia de superación, inclusión y movimiento.
Uno de los hitos recientes del Newcom uruguayo fue la participación en el primer Sudamericano de selecciones, realizado en Viedma, Argentina. Uruguay, liderado por Cristina Méndez, conquistó el vicecampeonato, un logro histórico para un equipo formado en apenas dos meses y medio.
“Fue un desafío enorme. Recorrimos torneos en Paso de los Toros, Maldonado, Florida y Canelones para seleccionar jugadores. Convocamos a unos 40, pero finalmente definimos un equipo de 14 jugadores”, relata Méndez.
La selección uruguaya, integrada por jugadores de Rocha, Maldonado, Florida, Canelones, Montevideo, San José y Durazno, logró un desempeño destacado: “El primer objetivo era jugar bien y lo logramos. Fue emocionante enfrentar a Argentina, que tiene años de ventaja, pero jugamos de igual a igual. Perdimos con mucha altura y fue un encuentro punto a punto”, recuerda Méndez con orgullo.
El cuerpo técnico, compuesto por Méndez, Carlos Pou y Carolina Bentancour, concretó cinco prácticas antes del torneo, un esfuerzo que rindió frutos en la cancha. “Estos 14 guerreros dejaron la camiseta en alto”, concluye.