O Globo - GDA
Con la llegada del verano, la historia se repite: la temporada cálida lleva a muchas personas a correr hacia los gimnasios en busca del cuerpo deseado. Esta carrera contra el tiempo, por supuesto, no es lo ideal para la salud, y tampoco dará resultados inmediatos.
Pero aquí la discusión será otra: ¿cómo este ambiente de entrenamiento, especialmente con un mayor número de personas circulando, facilita la proliferación de hongos, virus y bacterias transmisores de enfermedades?
"En cualquier lugar donde haya una acumulación de personas, hay una mayor posibilidad de transmisión de enfermedades infecciosas. Cuando no hay contacto directo, normalmente ocurre la transmisión de enfermedades respiratorias, como la gripe, el resfriado, el sarampión. Cuando hay cierto tipo de contacto, como en los gimnasios donde tocas algo que otra persona también tocó, hay más riesgo de enfermedades infecciosas", afirma el biomédico Roberto Figueiredo, también conocido como Dr. Bacteria.
Recientemente, un video se volvió viral en TikTok, llevando la discusión al centro de atención con un ejemplo extremo. Una brasileña mostró cómo quedaron sus piernas después de contraer una infección cutánea en el gimnasio al que asiste. En el video, que tuvo más de 1,8 millones de visualizaciones, la joven contó que tenía la inmunidad baja porque acababa de tomar antibióticos para tratar una infección urinaria. Notó que aparecieron pequeñas protuberancias en sus piernas. Sin embargo, con el paso de los días, la cantidad de vesículas aumentó y comenzaron a picar. La chica pensó que era una alergia y buscó ayuda médica. Cuando la alergóloga vio las lesiones en la piel, informó que se trataba de una infección y le preguntó a la joven dónde se había acostado.
"Solo puede haber sido en el gimnasio', pensé, porque fue el único lugar al que fui después de llegar de viaje, y recordé la colchoneta sucia en la que me acosté para hacer abdominales. Las protuberancias aparecieron en mayor cantidad dentro de la pierna. Y yo había entrenado piernas dos días antes, en la máquina aductora", relató la joven en el video.
En días más cálidos, las personas sudan más, aumentando la probabilidad de contaminación de los equipos y colchones. El sudor es una respuesta fisiológica del cuerpo para enfriarse. La combinación de humedad y alta temperatura es propicia para la proliferación de microorganismos que ya existen en nuestra piel y que son inofensivos en pequeñas cantidades. Estos hongos y bacterias también se aprovechan de los restos de la epidermis para alimentarse, potenciando aún más su multiplicación. Esta "sopa" de microorganismos en ebullición puede esparcirse por los equipos a través del sudor. Un patógeno que no afecta a una persona puede terminar causando enfermedades en otras dependiendo de la condición de su sistema inmunológico.
Dependiendo de la estructura del gimnasio, especialmente aquellos en barrios que suelen carecer de una buena refrigeración, el ambiente caluroso y húmedo favorece aún más la proliferación de agentes perjudiciales.
Existen medidas de seguridad que puedes tomar para minimizar las contaminaciones. Entre ellas, utilizar gel desinfectante siempre antes de tocar los equipos y colchones, y colocar una toalla sobre los aparatos para evitar el contacto directo de la piel con la superficie del equipo.
"En los vestuarios del gimnasio e incluso debajo de la ducha, se recomienda siempre usar sandalias para evitar el contacto directo del pie con el suelo potencialmente contaminado — aconseja el dermatólogo Luiz Gameiro, miembro de la Sociedad Brasileña de Dermatología.
A continuación, se detallan las principales enfermedades que pueden transmitirse en el gimnasio. Si notas algún síntoma o señal, busca la atención de un médico.
Sarna
La escabiosis, comúnmente conocida como sarna humana, es una parasitosis causada por el ácaro Sarcoptes scabiei variedad hominis. La contagio ocurre por contacto directo con personas, ropa u otros objetos contaminados. Este problema causa ampollas en el cuerpo que pueden picar. La cicatrización puede dejar manchas en la piel.
Conjuntivitis
La conjuntivitis puede tener diversas causas, ya sea viral, bacteriana o fúngica. Se caracteriza por la inflamación de la conjuntiva, la membrana transparente y delgada que recubre la parte blanca de los ojos y el interior de los párpados.
— La transmisión siempre ocurre cuando una persona con esta infección purulenta se frota los ojos con las manos y luego toca algún objeto. Luego, otra persona toca el área contaminada con las manos y se lleva las manos a los ojos, generando un nuevo proceso de conjuntivitis —explica Figueiredo.
Verrugas
Existen verrugas virales, causadas por el virus del papiloma humano (HPV). El patógeno penetra en la piel a través de pequeñas lesiones, desarrollando la verruga.
— Una persona que tiene una verruga plantar, que aparece en la palma de la mano y es conocida como ojo de pez, al tocar una barra del gimnasio, potencialmente está propagando ese virus. Cuando otra persona utiliza el mismo equipo, puede acabar siendo infectada. No significa que lo será, pero hay un riesgo —detalla Gameiro.
Foliculitis
Bacterias como la Staphylococcus aureus pueden provocar infecciones cutáneas, como la foliculitis, una inflamación que comienza en los folículos pilosos. Se caracteriza por la formación de pequeñas espinillas, con puntas blancas, alrededor de los pelos. Pueden picar y dejar la piel enrojecida y sensible. La transmisión puede ocurrir al entrar en contacto con superficies contaminadas con el pus que sale de las ampollas.
Hongos
Las micosis son causadas por hongos, presentes en el ambiente y en la propia piel humana, que se multiplican en áreas más húmedas del cuerpo. La sudoración excesiva debido a la actividad física, sumada al aumento de la temperatura y la fricción de la piel en algunos equipos del gimnasio, es la combinación perfecta para la multiplicación de estos microorganismos que son perjudiciales cuando están en grandes cantidades. Las micosis suelen causar picazón, descamación de la piel y enrojecimiento.
Baños y vestuarios del gimnasio, por ejemplo, suelen estar mojados y generalmente no cuentan con sistemas de refrigeración ni una buena circulación de aire. Este es un lugar propicio para el desarrollo de hongos. Por eso, nunca camines descalzo y siempre usa chanclas al ducharte en estos lugares.
Enfermedades respiratorias
Cuando la pandemia de Covid-19 comenzó a disminuir, varias ciudades permitieron la reapertura de gimnasios, siempre y cuando los alumnos y empleados usaran mascarillas. Esto se debe a que las enfermedades respiratorias, como la Covid-19, se transmiten por el aire. Sin embargo, hay virus (como el de la gripe) que pueden sobrevivir durante algunas horas en las superficies. Si alguien estornuda en la mano y luego manipula un dispositivo, otra persona podría contaminarse al tocar el área y llevarse la mano a la nariz o la boca.
Consejos para quienes hacen ejercicio en verano
Las altas temperaturas requieren cuidados específicos para aquellos que practican actividad física, especialmente si parte de ella se realiza al aire libre. El profesor de Educación Física Marcio Atalla, ofrece algunas recomendaciones, como preferir el inicio o el final del día para realizar la actividad física y mantenerse siempre hidratado.
"Para aquellos que eran sedentarios y van a comenzar a entrenar ahora, es importante recordar que es la regularidad la que dará resultados. No te sumerjas en programas que prometan pérdida de peso rápida. Si es posible, realiza tus ejercicios siempre a la misma hora, ya que tu cuerpo se adapta a una rutina. Si logras crear un hábito, podrás seguir haciendo actividad física cuando termine la motivación del verano", concluye Atalla.