Redacción El País
Detectar una mentira no es una tarea sencilla. La psicología sostiene que no existe una palabra o gesto único que permita identificar a un mentiroso, pero sí patrones de comportamiento que, analizados en conjunto, pueden dar pistas sobre el engaño.

En este contexto, la inteligencia artificial ha identificado algunas frases recurrentes en personas que suelen faltar a la verdad.

Si bien el lenguaje corporal y la coherencia del discurso son clave para detectar un engaño, existen ciertas expresiones que los mentirosos repiten con frecuencia. Algunas de las más comunes incluyen:

• “Para serte sincero” / “Para ser honesto”.
• “Yo nunca haría eso”.
• “Te lo juro”.
• “Como ya te dije”.
• “Eso no tiene sentido”.
• “No me acuerdo”.
• “¿Por qué mentiría?”.
• “Eso es todo lo que sé”.

Estas frases, por sí solas, no confirman una mentira, pero suelen formar parte de un patrón más amplio cuando se combinan con otras señales, como evasión de detalles, incongruencias en el relato y cambios en la expresión facial.

Los expertos en comunicación no verbal han estudiado por años los indicios del engaño. Paul Ekman, investigador de la Universidad de California y referente en el estudio de las emociones, sostiene que las microexpresiones faciales pueden ser una pista clave. Estas expresiones duran apenas una fracción de segundo y pueden reflejar miedo, culpa o incomodidad, revelando lo que la persona intenta ocultar.

Nicola, Silvana

Otro estudio, publicado en la revista Psychological Bulletin por la psicóloga Bella DePaulo, analizó más de 100 investigaciones sobre el comportamiento de los mentirosos. La conclusión fue que quienes mienten tienden a ser menos detallistas, hablar de forma menos fluida y repetir frases para ganar tiempo.

Por su parte, Aldert Vrij, profesor de Psicología en la Universidad de Portsmouth, afirma en su libro Detecting Lies and Deceit que el lenguaje corporal también ofrece señales. Según su investigación, los mentirosos suelen evitar o forzar el contacto visual, repetir afirmaciones y reducir sus movimientos corporales para controlar su discurso.

Si bien herramientas como ChatGPT pueden analizar patrones lingüísticos y ofrecer información sobre el engaño, no pueden reemplazar la labor de un psicólogo. La inteligencia artificial carece de conciencia y criterio clínico, por lo que su análisis es puramente estadístico y no se basa en una evaluación individualizada.

El trabajo de un profesional de la salud mental va mucho más allá de identificar frases o gestos. Implica evaluar el estado emocional y cognitivo de una persona, aplicar métodos validados científicamente y brindar herramientas concretas para manejar situaciones de engaño o desconfianza.

En caso de sospechar que alguien está mintiendo en un contexto relevante, lo más recomendable es analizar el conjunto de señales y, si es necesario, consultar con un especialista en comunicación no verbal o psicología del comportamiento.