Ana Abbona Santín
Existe una extendida noción según la cual la felicidad personal puede construirse y elevarse mediante la puesta en práctica de ciertas actividades y actitudes. Lo que hacemos y lo que pensamos, potencia nuestra capacidad de sentirnos dichosos y alcanzar el bienestar.

Si entendemos la felicidad como un camino en el que nuestra intención y nuestras decisiones son determinantes, nos volvemos protagonistas en nuestra propia historia.

Dentro de las actividades recomendadas por los especialistas se destaca el afrontamiento de problemas. Este concepto no se limita a dar solución a los desafíos, sino que incluye nuestra capacidad de gestionar las emociones que experimentamos cuando estamos en dificultades.

Para esto contamos con una variedad de recursos:

—Habilidades cognitivas, incluyendo la capacidad de análisis, pensamiento crítico y toma de decisiones. Las personas con fuertes habilidades cognitivas son capaces de evaluar una situación de manera objetiva y desarrollar soluciones efectivas.

—Habilidades emocionales, como por ejemplo la capacidad de manejar el estrés, el miedo y la ira. Cundo tenemos habilidades emocionales fortalecidas somos capaces de gestionar las emociones negativas de una manera saludable y productiva.

—Habilidades sociales, entre las que podemos mencionar la capacidad de comunicarnos de manera efectiva, construir vínculos y trabajar en equipo. Al poseer sólidas habilidades sociales somos capaces de obtener apoyo de los demás y cooperar para resolver problemas.

Los inconvenientes y dificultades son inevitables y son parte de la vida de todos los seres humanos, pero es posible describir una ruta que nos conduzca a una gestión exitosa.

—Reconocimiento del problema. La primera etapa para afrontar un problema es reconocer su existencia. Necesitamos ser conscientes de la situación y prever sus posibles consecuencias.

—Análisis del problema. Una vez que reconocemos un problema, es importante analizarlo detenidamente. Esto implica identificar la causa del problema, las posibles soluciones y las consecuencias de cada solución.

—Diseño de soluciones. Luego de analizar todas las opciones, llega el momento de diseñar soluciones, que deben ser viables, efectivas y aceptables para todas las partes interesadas. Podemos pensar en soluciones que modifiquen la situación conflictiva o problemática, o que nos permitan adaptarnos a ella.

—Implementación de soluciones. Cuando diseñamos la solución que nos parece más pertinente, es hora de pasar a la acción. Es primordial avanzar hasta esta etapa, evitando que un exceso de análisis nos paralice.

—Evaluación de soluciones. Una vez que se ha implementado una solución, es importante evaluar su efectividad. Esto implica monitorear los resultados y hacer los ajustes necesarios.

Las habilidades para afrontar problemas son importantes para alcanzar éxito en nuestra vida personal, profesional y académica. Si trabajamos para fortalecer nuestras habilidades para afrontar problemas seremos capaces de superar desafíos y lograr nuestros objetivos.

—Practicar la autoconciencia. Dediquemos el tiempo necesario para reconocer y comprender nuestras propias fortalezas y debilidades.

—Desarrollar una voz propia. Aprendamos a pensar de forma independiente y a cuestionar el status quo.

—Aprender a manejar el estrés. Practiquemos actividades que nos resulten entretenidas y divertidas, que nos distraigan y disminuyan nuestro estrés. De este modo estaremos en mejores condiciones para para lidiar con la presión.

—Construir vínculos saludables. Busquemos apoyo de amigos, familiares y profesionales. Se trata de no caer en la tentación de creernos autosuficientes, hay momentos en los que necesitamos otra mirada o algunos recursos externos.

—Ser pacientes. Aceptemos nuestras cualidades y trabajemos sobre aspectos que necesitamos y deseamos mejorar. El desarrollo de estrategias fuertes para el afrontamiento de problemas requiere tiempo y práctica.

—Ser felices, más allá de las vicisitudes de nuestra vida, es un aprendizaje del que todos podemos beneficiarnos. El resultado será una vida más plena y esperanzada.

En esta oportunidad, los desafíos que planteamos son de carácter lógico. Una buena manera de ejercitar nuestro cerebro y así contribuir a mantener su elasticidad.

Desafíos:

1. Escribe 2 palabras de seis letras utilizando estas letras: A - A - B - I - L - S

2. Coloca las vocales para completar la frase de Eleanor Roosevelt.
-L F-T-R- P-RT-N-C- - Q---N-S CR--N -N L- B-LL-Z- D- S-S S--Ñ-S.

3. Dos gatos detrás de un gato, dos gatos delante de un gato y un gato en medio. ¿Cuántos gatos son?

1.Soluciones: Sílaba o sabila.

2. El futuro pertenece a quienes creen en la belleza de sus sueños.

3. Son tres gatos.

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Ana Abbona Santín

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