Según la Organización Mundial de la Salud(OMS) más de 55 millones de personas viven con demencia. Por ello, es necesario concientizar a la población sobre esta enfermedad y las formas en las que podemos prevenirla. Pese a que no existe un tratamiento curativo, existen ciertas medidas que se pueden practicar a lo largo de nuestras vidas para ser precavidos sobre esta condición. El geriatra Carlos Sandoval, brindó información importante sobre esta enfermedad degenerativa.
La demencia es una enfermedad neurodegenerativa, progresiva e invalidante. Esta se caracteriza por la pérdida de funciones cognitivas, que hacen a la persona dependiente de los demás.
¿Cómo se comporta una persona con demencia?
En la gran mayoría de casos, la demencia inicia con pérdida de memoria reciente. No obstante, el paciente puede conservar su memoria antigua, la cual ha ido cultivando a lo largo de su vida. Por otro lado, esta enfermedad también puede presentarse con pequeños indicios de desequilibrio en la orientación, el cálculo y el razonamiento de la persona.
Según el especialista, hay ciertos síntomas que pueden ser signos de un caso de demencia. “Al inicio, puede pasar desapercibida. Sin embargo, posteriormente compromete funciones cognitivas del paciente”, añadió. Esta enfermedad compromete el habla, juicio y orientación de la persona. Por ello, también se pueden observar algunos trastornos de conducta en la persona afectada.
No todas las enfermedades cognitivas son demencia.
En algunos casos, la demencia puede confundirse con otras enfermedades o condiciones. En palabras del especialista, algunos de los padecimientos con los que se puede confundir son la sordera, el delirio o la depresión. En este último, el paciente está desganado y puede tener problemas de humor, pero está lúcido”, aclaró.
En esa línea, el delirio -o ‘delirium’- es una alteración grave de las capacidades mentales. Esta condición es diferente a la demencia debido a que es un cuadro agudo de alucinaciones, el cual puede ser momentáneo. Por otro lado, la demencia es un cuadro crónico y permanente.
¿Cómo prevenir la demencia?
Hasta el día de hoy, según el experto, no existe una cura total de la demencia. A pesar de ello, los especialistas recomiendan tomar en cuenta algunas medidas para prevenir esta enfermedad. “Lo primordial es la actividad física. Un envejecimiento activo puede ser la clave para no correr el riesgo de pasar por enfermedades neurodegenerativas”, estableció. También, el Sandoval indicó que, junto al ejercicio físico, se debe mantener una vida mental y social activa.
Por otro lado, el geriatra afirmó que es fundamental tener el control de cualquier enfermedad de fondo que pueda padecer el paciente. “Existen algunos factores de riesgo, como la diabetes, la hipertensión, el hipotiroidismo y el uso exagerado de sustancias tóxicas o psicofármacos”, agregó.
En el caso del hipotiroidismo, es preciso tomar en cuenta que la tiroides es la hormona del metabolismo y produce la tiroxina. Cuando se da una disminución de la sustancia tiroidea, se genera el hipotirodisimo. Esta afección genera tendencia al sueño, cansancio, piel seca, poca energía y, en algunos casos, aumento de peso. Según estudios, a pesar de que el porcentaje es bajo, existe una relación entre el hipotirodismo y la demencia. Por lo tanto, es recomendable incluir un examen de descarte en los chequeos del paciente y, de esta manera, prevenir algún cuadro de demencia a futuro.
Sandoval hizo hincapié en que el principal factor de riesgo para padecer demencia es la edad. Por ello, es imprescindible tener un envejecimiento activo y realizar los controles que sean necesarios durante esta etapa de la vida.
Para concluir, el geriatra recalcó que no existe un tratamiento curativo para la demencia. En cambio, existen tratamientos sintomáticos. Es decir, se pueden utilizar distintas metodologías para ayudar al enfermo en los primeros años de enfermedad a manejar ciertos síntomas, como la agresión o las alucinaciones.
El Comercio / GDA