Estos son los 5 rasgos de personalidad: prestá atención a estos detalles y descubrí cuál es el tuyo

Los rasgos de la personalidad son los que describen a cada persona, los que definen su forma de actuar. Descubre cuál es el tuyo.

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Personalidades múltiples.
Foto:Pixabay

El Comercio/GDA
En la psicología de la personalidad, se hizo un estudio conocido como Modelo de los cinco grandes (en inglés, “Big Five”) es un patrón en el estudio de la personalidadque examina los comportamientos a partir de cinco elementos amplios de los rasgos de cada uno. El modelo de los cinco grandes, creado por Raymond Cattell, tiene como objetivo describir la personalidad, y los psicólogos han ido presentando nuevos datos, utilizando diversas metodologías para examinar estos rasgos de personalidad de cada individuo.

Definición de los 5 rasgos de la personalidad

Existe un consenso general entre los expertos en personalidad de que la personalidad se puede dividir en estas 5 características clave que se enumeraron en la teoría de los Cinco Grandes de los rasgos de personalidad.

(Factor O): Apertura a la Experiencia. Demuestra cuando un sujeto tiende a buscar experiencias personales novedosas e imagina su futuro. Una persona abierta a la experiencia tiene una relación abierta con su imaginación, valora la belleza, las artes, y es consecuente con sus emociones y las de los que le rodean. Disfrutan rompiendo moldes y, como resultado de su curiosidad intelectual, frecuentemente saben mucho sobre una amplia gama de temas. Lo opuesto al cierre es el cambio o la experiencia.

Quienes obtienen puntajes bajos tienden a ser más tradicionales en sus intereses. Prefieren lo simple a lo sutil, ambivalente y complejo. Con frecuencia consideran que las artes o las ciencias son campos poco prácticos. Son moderados y apegados a la tradición, prefiriendo la familiaridad a la novedad.

(Factor C): Responsabilidad. El grado de enfoque en el objetivo y la autodisciplina del sujeto son indicadores de este rasgo de personalidad. Podríamos decir que una persona que se desempeña bien en el factor C es organizada, enfocada, completa sus tareas y delibera antes de tomar decisiones, todo ello sin perder de vista el mediano y largo plazo. En resumen, asumir la responsabilidad implica hacer dos cosas: primero, pensar y planificar de manera estructurada y específica; segundo, poner las ideas de uno en acción.

La medida en que el sujeto está abierto con los demás y dirige su energía en contextos sociales. En otras palabras, el factor E analiza cuánto disfruta un sujeto de la interacción social, cuánto disfruta comunicándose con los demás, etc. Su opuesto, la introversión, se caracteriza por personas reservadas que con frecuencia son pintadas como antipáticas. Prefieren la rutina y el ambiente familiar, y tienden a ser independientes.

No les gusta estar cerca de grandes grupos de personas y prefieren estar solos, pero esto no indica que no estén contentos. Con frecuencia tienen tanta energía como cualquiera en círculos de amistad cercanos. Es menos probable que tomen medidas que los extrovertidos y son más reflexivos.

(Factor A): Amabilidad. Depende de cuán respetuosos, tolerantes y serenos seamos. Una persona amable es alguien que cree en la bondad de los demás, tiene pasión por ayudar y también a los necesitados, es modesto, sin complicaciones, tiene empatía por los sentimientos y emociones de los demás.

El tipo de conductas prosociales que utiliza el individuo al interactuar con los demás reflejan este rasgo de personalidad. El nivel de simpatía será bajo si no se esfuerza mucho en hacer que los demás se sientan bienvenidos o cómodos, pero alto si se esfuerza por tener en cuenta los intereses, preferencias y puntos de vista de los demás.

(Factor N): Neuroticismo. El grado de estabilidad emocional de una persona determina qué tan bien puede manejar las circunstancias desafiantes de la vida. Los sujetos que están tranquilos y tienen menos probabilidades de enojarse o enojarse tienden a mantenerse activos y manejan muy bien sus crisis personales. El neuroticismo, por otro lado, es lo opuesto a la estabilidad emocional.

El factor N es el rasgo de personalidad que encontramos con mayor puntuación en las personas que tienen problemas para regular sus emociones y sufren cambios bruscos de humor con frecuencia.

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