La creatividad, el temple y la disciplina son cualidades que pueden entrelazarse para construir una vida plena y feliz. La creatividad es un concepto amplio que se define como la capacidad de generar ideas o conceptos nuevos y originales, de establecer nuevas conexiones entre ideas existentes, y de encontrar soluciones innovadoras.
Esta capacidad implica explorar de múltiples posibilidades y perspectivas, la visualización de ideas que aún no existen, la aplicación de ideas nuevas y originales para crear algo útil o valioso y la adaptación a nuevas situaciones.
De este modo podemos resolver problemas encontrando soluciones originales a desafíos complejos, ser más adaptables ajustándonos a los cambios y aprovechando las oportunidades, expresar nuestras ideas y emociones de manera única y significativa, aprender explorando nuevas áreas de conocimiento y desarrollar nuevas habilidades.
El temple refiere a la fortaleza emocional y mental necesaria para enfrentar desafíos y adversidades con calma y determinación. Es la capacidad de mantener la serenidad y el equilibrio en situaciones difíciles, sin abrumarse por las emociones negativas.
Se compone de resiliencia, autocontrol, coraje, perseverancia y optimismo y permite mantenernos firmes ante los desafíos, al punto que salgamos airosos y fortalecidos.
Este trío de capacidades se completa con la disciplina, un atributo que engloba un conjunto de prácticas y habilidades que desarrollan y potencian la habilidad de reconocer, entender y gestionar las emociones de manera constructiva. Es el entrenamiento de las emociones para que trabajen a nuestro favor y no en contra.
Para cultivar la disciplina podemos practicar diversas estrategias:
- Auto observación: prestar atención a nuestras emociones, identificar patrones y desencadenantes más evidentes.
- Mindfulness: practicar la atención plena para cultivar la conciencia del momento presente y reducir el estrés.
- Gestión emocional: tomar conciencia de la relación entre emoción, cognición y comportamiento.
- Empatía: cultivar el comprender y compartir los sentimientos de los demás.
- Comunicación asertiva: expresar necesidades y sentimientos de manera clara y respetuosa.
- Resolución de conflictos: manejar los desacuerdos de manera constructiva.
La disciplina es un proceso continuo de aprendizaje y crecimiento personal; cuando la cultivamos, podemos mejorar la calidad de vida y relaciones.
Pilares
Más allá de los beneficios que tienen creatividad, el temple y la disciplina por separado, es conveniente preguntarnos por qué se consideran fundamentales para nuestra felicidad.
La creatividad puede ser una fuente inagotable de inspiración si cultivamos la curiosidad y la experimentación, si prestamos atención al entorno y nos preguntamos el porqué de las cosas. Al explorar diferentes disciplinas y mantener una mente abierta, e interactuando con diversas personas, generamos y captamos nuevas ideas y perspectivas. La creatividad es una herramienta poderosa que nos permite encontrar inspiración en cualquier lugar y momento.
El Temple es un escudo protector frente a las adversidades. Para fortalecer esta capacidad, los expertos aconsejan ejercitar la autoconciencia emocional, practicar la gratitud y desafiar nuestros límites. Al desarrollar nuestro temple conseguiremos mayor seguridad y confianza, nuestro bienestar emocional mejorará y con el las posibilidades de éxito.
La disciplina es el motor de las transformaciones, ayuda a mantener el foco, ser constantes, superar la procrastinación y adaptarnos. Gracias a ella, convertimos nuestros sueños en realidad; es lo que conecta nuestros deseos con los logros y es la herramienta con la que moldeamos nuestra vida y alcanzamos metas.
Intersección
Cuando desarrollamos la creatividad, el temple y la disciplina equilibradamente, se complementan y se refuerzan mutuamente.
- Exploremos nuestras pasiones. Utilicemos la creatividad para identificar aquello que nos hace sentir vivos.
- Definamos nuestros valores. Nuestros valores nos guiarán en la toma de decisiones y nos ayudarán a alinear nuestras acciones con nuestro propósito.
- Establezcamos metas claras. Aprovechemos la disciplina para establecer metas específicas, medibles, alcanzables, relevantes y con un tiempo limitado (SMART).
- Tomemos acción. No nos quedemos estancados en la teoría. ¡Empecemos hoy!
- Seamos pacientes y perseverantes. El proceso de ser personas realizadas y felices lleva tiempo. No nos desanimemos si no encontramos las respuestas de inmediato.
- Aprendamos de la experiencia: cada una de ellas, positiva o negativa, nos enseña algo de nosotros mismos.
En conclusión, la creatividad nos ayuda a explorar, el temple nos mantiene en el camino y la disciplina nos lleva a la meta. Al combinar estas tres cualidades, vamos a descubrir lo que nos apasiona y podremos vivir la mejor vida posible.
Desafíos
1.
Escribe 3 palabras de 6 letras utilizando estas letras:
N – O – O – P – R – T
2.
Todas terminan con RDA:
· Pelo.
· Borrachera.
· Caterva.
· Lenta.
· Medida.
3.
Todas contienen la combinación OME:
· Barrilete.
· Honda.
· Letra griega.
· Fontanero.
· Fruta.
Respuestas 1. Portón. Pronto. Protón.
2. Cerda. Curda. Horda. Lerda. Yarda.
3. Cometa. Gomera. Omega. Plomero. Pomelo.