Qué sabemos sobre la estructura y el funcionamiento del cerebro de las personas con depresión

La relación entre el sistema nervioso y el trastorno depresivo es compleja, pero varias investigaciones han avanzado en comprenderla.

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Hombre triste y preocupado.
Foto: Pixabay

La depresión está largamente extendida en el mundo entero. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 280 millones de personas sufren de este trastorno mental y estima que es un 50% más frecuente entre las mujeres que en los hombres.

Durante años se ha estudiado la relación entre el cerebro y la depresión, ya que es el órgano encargado de regular el estado de ánimo, las emociones y la motivación.

Qué pasa en el cerebro de una persona deprimida.

Estudios como el del Imperial College de Londres, publicado en la revista Biological Psychiatry, han demostrado que las personas con depresión presentan bajos niveles de neurotransmisores, como la serotonina, también denominada “hormona de la felicidad”.

Asimismo, otros neurotransmisores como la norepinefrina y la dopamina desempeñan un rol clave en la regulación de las emociones.

De acuerdo con algunos trabajos científicos, la depresión puede estar asociada con cambios en la estructura y la actividad del cerebro, incluyendo una reducción en el tamaño de ciertas áreas cerebrales que se encargan de la regulación del estado de ánimo y las emociones.

Harvard Health Publishing refiere a una publicación que encontró que el hipocampo (zona vinculada con la memoria a largo plazo, la formulación de recuerdos y la conexión de estos con las emociones) era entre un 9% y un 13% más pequeño en las mujeres deprimidas en comparación con las que no lo estaban. Estos resultados guardan relación con los obtenidos en la publicación en la revista Molecular Psychiatry, donde se analizó el cerebro de 8927 personas y se demostró que cuantos más episodios de depresión habían sufrido, más pequeño era el hipocampo.

La depresión es un trastorno complejo y los cambios a nivel cerebral no tienen por qué ser su causa. Por este motivo, la relación entre la depresión y el cerebro es un tema en constante evolución.

En caso de notar altos niveles de ansiedad, pérdida de energía, sentimientos persistentes de tristeza y desesperanza, problemas para concentrarnos, pensamientos rumiantes, cambios en el apetito o el peso, entre otros síntomas, es importante buscar apoyo psicológico.

(Por El Comercio GDA)

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