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Practicar mindfulness puede ser tan eficaz para tratar trastornos mentales como algunos antidepresivos. Esta es la conclusión de un nuevo estudio que involucró a investigadores de varias instituciones, liderado por el Instituto Nacional de Salud Mental de Bethesda, en Estados Unidos.

La práctica de mindfulness, una especie de meditación, mostró resultados similares al antidepresivo escitalopram en la reducción de síntomas de agorafobia, ataques de pánico y ansiedad.

Los trastornos de ansiedad afectan a millones de personas en el mundo. Uno de los tratamientos más comunes son los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS); sin embargo, algunos medicamentos de esta clase pueden presentar efectos secundarios. En el caso del escitalopram, los más comunes son: náuseas, sequedad bucal, sudoración, dolor de cabeza e insomnio.

El estudio demostró que practicar mindfulness como estrategia de reducción de estrés no fue inferior a los efectos del escitalopram, con la ventaja de estar libre de efectos adversos.

Se analizaron los resultados de 276 adultos con diagnósticos de trastornos de ansiedad, que incluían agorafobia, pánico, ansiedad generalizada y social. Los participantes fueron divididos en dos grupos: uno ingresó a un programa de mindfulness para el manejo del estrés, mientras que el otro inició un tratamiento con dosis diarias de 10 a 20 mg de escitalopram.

Los resultados, publicados en la revista científica JAMA Network Open, mostraron que ambas estrategias tuvieron efectos similares en la reducción de la ansiedad durante las ocho semanas del estudio. El escitalopram logró una ventaja leve a mitad del tratamiento, durante la cuarta semana, pero esta mejora no se mantuvo hasta el final del periodo.

La única diferencia notable entre las dos estrategias fue en los efectos secundarios. En el grupo que recibió medicación, el 79% de los participantes reportó síntomas adversos, mientras que solo el 15% de los practicantes de mindfulness informaron sensaciones desagradables.

Desarrollado en la década de 1970 en EE. UU., el mindfulness es una técnica de atención plena basada en principios budistas. Esta forma de meditación propone que el practicante reduzca los estímulos enfocando su atención en una sensación, un sonido, una representación visual o un mantra. El objetivo es disminuir la velocidad e intensidad del flujo de pensamientos cotidianos.