Cómo incorporar carbohidratos en la alimentación y por qué es importante consumirlos

Los carbohidratos, comúnmente estigmatizados en contextos de pérdida de peso, desempeñan un papel fundamental en la nutrición. Contrario a la creencia popular, los carbohidratos ofrecen beneficios esenciales para la salud y son necesarios para el funcionamiento óptimo del cuerpo.

Compartir esta noticia
Desayuno, banana, frutos secos
Desayuno saludable, con fruta y frutos secos
Foto: Freepik.

Redacción El País
Los carbohidratos, comúnmente estigmatizados en contextos de pérdida de peso, desempeñan un papel fundamental en la nutrición. Por este motivo, resulta crucial diferenciar entre las distintas clases de carbohidratos para optimizar la alimentación saludable.

Los carbohidratos, que son macronutrientes presentes en diversos alimentos y bebidas, se encuentran principalmente en productos de origen vegetal como los granos. También se añaden a los alimentos procesados en la forma de azúcar o almidón, de acuerdo a MedlinePlus.

Las fuentes naturales de carbohidratos incluyen:

  • Frutas
  • Verduras
  • Leche
  • Nueces y semillas
  • Granos
  • Legumbres como frijoles, guisantes y lentejas

Estos carbohidratos se clasifican en tres categorías principales:

  1. Azúcar, que se presenta en forma simple y es un componente de alimentos como frutas y lácteos.
  2. Almidón, que es un tipo de carbohidrato complejo encontrado en vegetales y legumbres.
  3. Fibra, otra forma de carbohidrato complejo.

Consumo de carbohidratos

Las directrices alimentarias estadounidenses sugieren que los carbohidratos compongan entre el 45% y el 65% de las calorías diarias. En una dieta de 2000 calorías, esto equivale a entre 225 y 325 gramos de carbohidratos por día. Las etiquetas de información nutricional ayudan a monitorizar la ingesta.

¿Por qué consumir carbohidratos?

Los carbohidratos son la principal fuente de energía del cuerpo, promueven la protección contra enfermedades y asisten en la gestión de peso. Las fuentes adecuadas de carbohidratos facilitan una sensación de saciedad con menos calorías, contribuyendo así al control del peso sin incrementar el riesgo de obesidad, de acuerdo a MedlinePlus.

¿Cómo incorporarlos en tu dieta?

  • Consumir frutas y verduras que aportan fibra.
  • Elegir granos integrales en lugar de refinados.
  • Preferir lácteos bajos en grasa.
  • Integrar legumbres como una fuente de nutrientes y proteínas.
  • Limitar la azúcar agregada siguiendo las pautas que aconsejan que menos del 10% de la ingesta calórica diaria provenga de azúcares añadidos.

Este contenido fue hecho con la asistencia de inteligencia artificial y verificado por un periodista de El País.

¿Encontraste un error?

Reportar

Te puede interesar