Redacción El País
Los efectos secundarios del ayuno intermitente pueden variar de una persona a otra y dependen de varios factores, como la duración y frecuencia del ayuno, y el tipo de dieta seguida durante los períodos de alimentación.
A continuación se listan las consecuencias negativas que pueden surgir de seguir la dieta del ayuno intermitente:
- Sensación de hambre: durante los períodos de ayuno, es normal experimentar sensaciones de hambre, según informó Mayo Clinic. Con el tiempo, el cuerpo generalmente se adapta y los sentimientos de hambre disminuyen.
- Cambios en el estado de ánimo y la energía: la restricción calórica puede afectar el estado de ánimo, según una investigación publicada en la revista científica Nutrients en 2019. Algunas personas, además, pueden experimentar una disminución de la energía y sentirse fatigadas durante los períodos de ayuno, apuntó Mayo Clinic.
- Dificultad para concentrarse: algunas personas pueden tener dificultades para concentrarse o experimentar neblina mental durante el ayuno, indicó un estudio publicado en la revista científica Physiology & Behavior en 2020. Esto puede deberse a la falta de glucosa en el cerebro, que es la principal fuente de energía para el órgano.
- Estreñimiento: la falta de fibra en la dieta durante los períodos de ayuno puede llevar a que algunas personas resulten estreñidas, apuntó Mayo. Es importante asegurarse de incluir suficiente fibra durante los períodos de alimentación para promover la regularidad intestinal.
- Otros problemas digestivos: algunas personas pueden experimentar malestar estomacal, acidez estomacal o indigestión durante los períodos de ayuno. Esto puede deberse a cambios en los patrones de alimentación y a la producción de ácido gástrico.
- Pérdida de masa muscular: el ayuno prolongado puede llevar a la pérdida de masa muscular, indicó Mayo, especialmente si no se sigue una dieta equilibrada y se consume suficiente proteína durante los períodos de alimentación.
Estos efectos secundarios generalmente son temporales y pueden ir disminuyendo a medida que el cuerpo se adapta al ayuno intermitente. Este período puede llevar un mes, según indicó Mayo Clinic. Sin embargo, si se experimentan efectos secundarios severos o prolongados, se debe consultar a un profesional de la salud.
Este contenido fue hecho con la asistencia de inteligencia artificial y verificado por un periodista de El País.