Redacción El País
El jugo de apio es una bebida que se ha puesto de moda en años recientes, con la promesa de ser una fuente de nutrientes esenciales, vitaminas, minerales y antioxidantes. Sin embargo, entre algunas afirmaciones carecen de fundamento científico.

Esta bebida se prepara licuando los tallos del apio con agua. Contiene vitaminas A, C y K, importantes para la visión, la función inmune, la producción de colágeno, la coagulación de la sangre y la salud ósea. También suministra folato, potasio, sodio y calcio, esenciales en la síntesis de ADN, el equilibrio de fluidos y señales nerviosas, explicó el portal especializado PharmEasy.

El apio no solo aporta vitaminas y minerales, sino que es una planta rica en compuestos específicos como flavonoides (apigenina y luteolina), ácidos fenólicos y ftalidas. Estos han demostrado tener efectos antiinflamatorios y anticancerígenos, y también pueden beneficiar la salud cardiovascular y cognitiva.

En una comparación entre el jugo de apio, el de naranja y el de manzana, se evidencia que el jugo de apio supera a los otros respecto a su contenido de vitaminas A y K, aunque pierde respecto al contenido de vitamina C. Sin embargo, tiene menos calorías y azúcares, por lo que podría tratarse de la opción más saludable de las tres.

Esta bebida destaca por su capacidad de hidratación, su bajo contenido calórico y su efecto antiinflamatorio, que puede ser un jugo beneficioso para personas con enfermedades crónicas como la artritis, el asma y las enfermedades neurodegenerativas. Además, la investigaciones sugieren posibles aportes a la salud gastrointestinal y cardiovascular, y hasta un potencial anticancerígeno y de apoyo a la fertilidad.

Entre las afirmaciones sin evidencia científica está el "efecto detox" (desintoxicación) del hígado y la ayuda en la pérdida de peso rápida por medio del ayuno y la ingesta de solamente jugo de apio. Es importante recordar que el cuerpo humano cuenta con su propio sistema de desintoxicación a través del hígado, riñones, intestinos y pulmones.

La preparación de jugo de apio es simple y puede volverse parte de una dieta variada. Sin embargo, no debe sustituir comidas completas ni usarse bajo la idea de desintoxicar el cuerpo.

Aquellos con alergia al apio podrían experimentar reacciones severas tras su ingesta. Además, el alto contenido de sodio del jugo podría complicar ciertas condiciones médicas relacionadas con la presión arterial o las enfermedades cardíacas, advirtieron desde PharmEasy.

A pesar de no tener estas condiciones, siempre se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de incorporar algo nuevo a la dieta.

Este contenido fue hecho con la asistencia de inteligencia artificial y verificado por un periodista de El País.