Redacción El País
Entre los frutos secos, las nueces se destacan como una fuente excepcional de nutrientes esenciales, proporcionando altos niveles de proteínas, antioxidantes, fibra, minerales como sodio, potasio, fósforo, hierro, zinc, magnesio, calcio, y vitaminas B y E.

Además de su riqueza nutricional, las nueces son conocidas por contener "grasas buenas", específicamente monoinsaturadas y poliinsaturadas. Según la información proporcionada por la entidad sin ánimo de lucro Mayo Clinic, estas grasas contribuyen a reducir los niveles de colesterol LDL, disminuyen los triglicéridos, previenen la coagulación sanguínea y mejoran la salud de los vasos sanguíneos.

Entre los frutos secos, las nueces destacan como una variedad popular y consumida que ofrece múltiples beneficios. Estas nueces provienen del nogal, un árbol originario de Asia Menor y Europa, y se caracterizan por su forma distintiva que se asemeja a la del cerebro humano.

Monique Tello, doctora, investigadora y colaboradora en el Programa de Estilo de Vida Saludable de la Facultad de Medicina de Harvard (Estados Unidos), destaca como punto fundamental la planificación desde la noche anterior, proponiendo una cena temprana, preferiblemente antes de las 20 horas.

En contraste con otros expertos, la doctora va más allá al aconsejar que la primera comida del día, el desayuno, se consuma después de 16 horas desde la cena, en lugar de 12.

En cuanto a la elección de alimentos para la mañana, sugiere evitar aquellos que causen picos de azúcar en sangre, favoreciendo opciones con un índice glucémico bajo. Algunas de las alternativas que menciona son:

— Yogur natural (rico en calcio y sin necesidad de ser desnatado)

— Fruta (fuente de vitaminas y fibra)

— Pan o cereales integrales (rica en fibra, vitaminas, minerales y otros nutrientes)

— Nueces (ricas en grasas "buenas")

A pesar de su reputación injusta asociada con el aumento de peso, las nueces deberían considerarse, según Harvard, un elemento esencial en la primera comida del día.

"La nuez es el fruto seco más saludable de todos. Aunque se le considere un superalimento, en mi opinión, esta etiqueta debería usarse con cierta precaución", señala esta especialista en Nutrición.

"Las nueces ofrecen propiedades extraordinarias y se recomienda encarecidamente incluirlas en el desayuno debido a que proporcionan un impulso de energía sostenible y duradero, esencial para enfrentar la jornada, sin provocar el efecto 'montaña rusa' asociado con los carbohidratos de absorción rápida", advierte la experta de Harvard.

Además, destaca que las nueces son una fuente significativa de proteínas y constituyen una valiosa fuente de ácidos grasos Omega 3, así como de vitaminas del grupo B y E. La especialista subraya la importancia de tener "vitaminas del grupo B en nuestro desayuno, ya que son las encargadas de activarnos desde el punto de vista neurológico". 

Entre los beneficios más conocidos de las nueces se encuentra su capacidad para prevenir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Según un estudio del National Institute of Food and Drug Safety Evaluation (Corea), este fruto seco contribuye a reducir los niveles elevados de colesterol, a excepción del colesterol "bueno" o HDL. Los altos niveles de colesterol representan un factor de riesgo para enfermedades cardiovasculares como la aterosclerosis, el infarto de miocardio y el accidente cerebrovascular.

Adicionalmente, según una publicación en la revista Nutrients, las nueces contienen flavonoides, terpenoides, polifenoles, alcaloides y esteroles, sustancias que estimulan el sistema inmunológico y le confieren al fruto seco cierta capacidad antiviral.

En cuanto al valor nutricional de las nueces, según un artículo de La Vanguardia, la tabla sería la siguiente:

— Calorías: 607

— Grasas totales: 54 g

— Hidratos de carbono: 21 g

— Proteínas: 20 g

— Fibra: 3,7 g

— Azúcares: 4,2 g