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La leche dorada, o "Golden Milk" en inglés, es una bebida que ha ganado reconocimiento en la actualidad debido a sus amplios beneficios para la salud. Entre ellos, los especialistas señalan que el consumo de esta bebida reduce el nivel de azúcar en la sangre y mejora la inmunidad. También está asociada a la reducción del riesgo de contraer enfermedades como el Parkinson y el Alzheimer, que están relacionadas con problemas neurodegenerativos.

El nombre proviene de su color similar al oro, atribuido a la cúrcuma, una especia conocida por su gran poder antioxidante y antiinflamatorio. Según los nutricionistas, esta bebida debe prepararse preferentemente con leche vegetal para evitar las grasas saturadas. Además, se le pueden añadir especias como canela, jengibre, cardamomo e incluso pimienta.

La preparación de esta deliciosa —y recomendable— bebida es simple y directa. Solo hay que combinar ciertos ingredientes, que pueden variar según el gusto, como la canela, el jengibre y, opcionalmente, algunas gotas de esencia de vainilla. Después de añadir los ingredientes a la leche, calentala hasta que todo esté disuelto. Para alcanzar la temperatura deseada, la mezcla debe cocinarse a fuego medio durante cinco minutos y servirse tibia.

La mayoría de los estudios de diferentes universidades recomiendan consumir entre 500 y 2000 mg de leche dorada al día para obtener el máximo beneficio. Algunas empresas ya idearon una mezcla en polvo para preparar la leche dorada.

Foto: Difusión.

Debido a su variada composición de ingredientes, la leche dorada tiene propiedades neuroprotectoras directamente relacionadas con la cúrcuma y su componente activo, la curcumina. Este último es rico en efectos antioxidantes y beneficiosos para el cerebro, que está en constante funcionamiento.

Consumir un vaso de leche dorada diariamente protegerá las células cerebrales y actuará como una barrera para prevenir el deterioro cognitivo. Con compuestos bioactivos, la bebida contribuye a la salud general y puede mejorar la memoria, un proceso que necesita ejercitarse constantemente para evitar alteraciones.

Además, la cúrcuma, que también está presente en la dieta de animales, puede mejorar el revestimiento de los vasos sanguíneos, ayudando a optimizar la circulación en el sistema cardiovascular.