En redes sociales, los entusiastas de las dietas afirman que los residuos de semillas de papaya combaten a los parásitos. Una usuaria de TikTok cuya cuenta está dedicada a la pérdida de peso afirma que, si preparas batidos de jugo de limón, piña, jengibre y pepino, licuado hasta hacer espuma, y lo tomas dos veces al día, puedes bajar hasta cinco kilos en una semana. Unos elíxires de sabor intenso prometen reajustar el intestino, mientras que un conjunto de seis bebidas diarias (a base de jugo de zanahoria, de manzana y jugos de verduras verdes, entre otros) conforman “la depuración para la delgadez”.

Los famosos han abrazado este tipo de dietas, dcomo Beyoncé y Gwyneth Paltrow, quien anuncia con regularidad los productos desintoxicantes de su marca de estilo de vida, Goop.

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Todos los años, el mundo del bienestar promueve las depuraciones o desintoxicaciones. A menudo, son dietas líquidas que consisten principalmente en jugos de frutas y verduras. Los fabricantes de estas dicen que con un día o tres (u ocho) de hacer todas tus comidas solo con productos bebibles, se van a eliminar todas las toxinas de tu cuerpo; tu piel se va a aclarar y tu estómago se va a reducir. Te sentirás, más o menos, puro.

No obstante, hay muy pocas pruebas que respalden estas afirmaciones. “No hay estudios relevantes sobre la mayoría de las depuraciones que existen”, asegura la doctora especialista en medicina integrada Melinda Ring.

Sin embargo, algunas personas afirman que se sienten mejor cuando se hacen una depuración de este tipo: duermen mejor, tienen más energía o piensan con más claridad. Los expertos en nutrición aseguran que las personas que prueban estas depuraciones pueden experimentar beneficios positivos a corto plazo, pero no debido a la bebida específica que están tomando. Además, conllevan muchos riesgos. Esto son algunas de las cosas que hay que saber al respecto.

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El asunto de la “limpieza” proviene de la idea de que se acumulan toxinas nocivas en el cuerpo, y que el secreto para mejorar la salud es expulsarlas. “La gente tiene esta idea de que lo que hay en el cuerpo son armas de destrucción masiva y que desecharlas va a mejorar la situación”, dice Gerard Mullin de Johns Hopkins Medicine, especializado en gastroenterología.

Pero el cuerpo tiene muchos filtros. Los riñones, el hígado, la piel y la vejiga se encargan de eliminar toxinas y desechos. Tampoco hay investigaciones sólidas que demuestren que los principales ingredientes de muchas depuraciones, como el limón y el vinagre de sidra de manzana, aceleren el metabolismo o ayuden a procesar los residuos con mayor rapidez.

Hay un efecto placebo que va de la mano con la depuración, afirma Ring. Si estás convencido de que una limpieza te hará sentir mejor, podés realmente llegar a creer que te beneficia.

Un régimen así también puede ayudar a que los niveles de energía de algunas personas sean más constantes, debido a lo que están eliminando de sus dietas, no a lo que están añadiendo. Cuando las personas optan por una depuración, suelen beber más agua y consumir menos azúcar de lo que hacen normalmente. Si acostumbraban comer alimentos pesados y procesados y los cambian por licuados a base de frutas y verduras, se benefician de la reducción de azúcares añadidas y grasas. Los alimentos abundantes en carbohidratos refinados, como el pan blanco y la repostería, disparan el nivel de azúcar en sangre y luego los niveles de energía se desploman cuando vuelve a bajar la glucosa.

Pero, como dice la dietista Beth Czerwony: “Mientras algunas personas se sienten con más energía durante una limpieza, otras pueden sentirse agotadas y tener dificultades para pasar el día debido a las pocas calorías que consumen”. Eso puede dar lugar a dolores de cabeza la sensación de irritación. También pueden desembocar en diarrea o estreñimiento.

“Si vas a hacer una depuración, elige una que no dure más de tres días”, aconsejó Czerwony. La limitación temporal es importante para evitar carencias de nutrientes y desequilibrios. También es fundamental asegurarse de no consumir un exceso de frutas y verduras. Esto puede parecer ilógico, pero quienes hacen dietas de desintoxicación con jugos pueden desarrollar problemas renales porque ciertas verduras como la espinaca tienen un contenido elevado de oxalato, lo cual pueden causar cálculos renales.

Además, cualquier supuesto beneficio de una depuración temporal con jugos no va a contrarrestar los efectos de una dieta poco saludable. Para incorporar hábitos más saludables a largo plazo elimina, en la medida de lo posible, los alimentos procesados y envasados, y asegúrate de ingerir las cinco raciones recomendadas de frutas y verduras al día. Y mejor ir por carbohidratos complejos como los cereales integrales, en lugar de la harina procesada. Más consjos: alimentos abundantes en fibra, como los frutos secos, frijoles y manzanas, que ayudan a regular el tracto gastrointestinal. Un nivel moderado de ejercicio y dormir bien también pueden darte más energía a lo largo del día, pero no es necesario recurrir a una desintoxicación para sentirte mejor. El cuerpo sabe cuidarse solo.

Dani Blum – The New York Times