Redacción El País
La cafeína es una de las sustancias psicoactivas más consumidas en el mundo. Este estimulante natural que pertenece a la familia de los alcaloides está presente en el café y también —aunque en menor medida— en otras bebidas como el té y el mate, sin dejar de mencionar el chocolate y algunos analgésicos.

Una de las principales propiedades de la cafeína es su capacidad estimulante del sistema nervioso central, de ahí que muchos opten por reducir o erradicar su consumo.

Aunque hay diversos mitos y leyendas acerca de sus beneficios o perjuicios para la salud, hay cada vez más estudios sobre los efectos que tiene esta sustancia en el cuerpo y eso facilita tomar una decisión sobre su consumo.

Foto: Archivo El País

Dependencia:

Por ser un estimulante del sistema nervioso central, su uso habitual puede generar cierta dependencia física, coincidieron especialistas consultados por el suplemento Domingo. Los síntomas típicos de la abstinencia son dolor de cabeza, irritabilidad, fatiga, decaimiento, ansiedad y dificultad para concentrarse. A pesar de esto, si se tiene un consumo moderado de cafeína no hay amenaza para la salud física y emocional.

Estado de alerta:

Que la cafeína sea un estimulante del sistema nervioso central también tiene un lado A y un lado B en lo que refiere al estado de alerta y la concentración.

"Produce un efecto temporal de restauración del nivel de alerta y eliminación de la somnolencia", explica la nutricionista Viviana Desanzo, del Centro Terapéutico Máximo Ravenna.

Así, un consumo excesivo podría potenciar el insomnio. Sin embargo, consumirla de forma moderada ayuda a reducir "la sensación de cansancio y facilita el esfuerzo intelectual a pesar del sueño", explicó la nutricionista Paula Moliterno en la entrevista con Domingo.

Salud del estómago y el intestino:

La cafeína es un estimulante potente de la secreción y la motilidad gástrica. De ahí que, ante una patología digestiva, gástrica o intestinal, sea recomendable reducir la ingesta de cafeína.

Salud cardiovascular:

Abandonar la cafeína podría reducir la presión arterial y disminuir el ritmo cardíaco, apunta BBC Mundo, aunque estudios señalan que los cambios son leves. Según una investigación de médicos israelíes, los perjuicios recién aparecen al consumir diez (o más) tazas de café por día.

Salud dental:

Abandonar el consumo de cafeína puede repercutir, indirectamente, en la salud bucal y en que los dientes luzcan más blancos. Tanto café como otras bebidas altas en cafeína contienen compuestos —incluyendo los taninos— que pueden causar futuras afecciones y disminuyen el esmalte de los dientes.