Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de mortalidad en Uruguay y todos los prestadores de salud realizan importantes esfuerzos para intentar bajar ese índice. La dieta, el ejercicio físico realizado regularmente, abstenerse del tabaquismo, intentar bajar los niveles de estrés, entre otras recomendaciones, ya forman casi parte del conocimiento colectivo en lo que hace al cuidado del corazón.
Pero también importa contar con herramientas adecuadas y útiles para diagnosticar eventuales dolencias y detectar, lo más tempranamente posible, condiciones que pueden incidir sobre la salud de este órgano y el bienestar general de la persona o paciente.
Desde hace aproximadamente un año, está disponible en Uruguay un aparato que puede contribuir en esa dirección y es un avance tecnológico y médico que Marianela Méndez, jefa del departamento de cardiología del Casmu, califica de “revolucionario” y como uno de los hechos más importantes en su trayectoria profesional. Este dispositivo permite realizar electrocardiogramas de manera portátil. Uno puede llevar ese gadget a donde quiera y pueda, y hacerse uno mismo dicho estudio, sin necesidad de acudir a un centro de salud.
En la terminología médica, a esto se le llama telecardiología ambulatoria. Si bien la tecnología existe y se aplica desde hace aproximadamente un año, Méndez dice que la etapa más intensa en su uso y despliegue social está empezando ahora (ver más abajo). Al aparato se lo ha llamado MiECG 7 (por “Mi electrocardiograma” y 7 por los días de la semana), y Méndez dice que es particularmente indicado para pacientes con “eventos cardíacos frecuentes, pero no permanentes. Palpitaciones, sudoraciones, dificultades para respirar... que no son detectados por estudios convencionales”.
En última instancia, le corresponde al médico evaluar si es oportuno que el o la paciente comience a realizarse ese registro regularmente. “En ese caso, se le venvía un kit a la persona, que consiste en el dispositivo, un celular con acceso a datos, electrodos descartables y un manual de uso.
Además, la empresa que proporciona estos aparatos, Bambus Life, le explica al paciente cómo proceder para realizarse el electrocardiograma. “Es un estudio bastante sencillo y puede hacerse prácticamente en cualquier lado”, explica la cardióloga y añade que permite ahorrar tiempo y traslados innecesarios.
Todos los datos del estudio quedan registrados en el celular, y se transfieren en tiempo real al centro de salud. Además, esos indicadores dan pie para tres tipos de diagnósticos, clasificados por colores: blanco (cuando no hay patología), amarillo (indica un cambio leve y se se coordina una visita a una policlínica), y rojo (cuando hay que dirigirse o llamar a la emergencia del prestador de salud del o la paciente).
Méndez aclara que más allá de cómo uno se sienta, hay que hacerse varios estudios, para tener un marco de referencia. “Así sabemos de qué punto partimos. Aun cuando no haya síntomas, igual es recomendable hacerse un registro. Luego, cada vez que uno siente algún síntoma, hay que realizar el estudio de nuevo”. Esto, agrega la profesional, porque muchas veces las arritmias son silentes: el paciente puede no darse cuenta de que tiene un evento cardíaco.
“Es muy importante para nosotros, como médicos, porque a través de estos estudios hemos detectado arritmias y recetado medicación específica como, por ejemplo, aquellas arritmias que tienden a dar embolias. Ya hemos registrado varios casos así desde que está en uso Miecg 7, y hemos podido prevenirlos”.
Méndez comenta que esta tecnología llegó para quedarse, y que terminará formando parte de todos los sistemas de salud. “Siempre buscamos y estudiamos cómo prevenir, de la mejor manera posible, dolencias cardiovasculares y detectar todos los eventos cardíacos que aunque para el paciente son muy molestos, porque muchas veces son eventos muy frecuentes, sin embargo, no duran en el tiempo, por lo que no podemos verlos en otros estudios. Si con esta tecnología podemos detectar arritmias graves -que pueden conducir a la muerte o dejar secuelas muy graves- es muy útil, porque puede contribuir a la detección temprana y a una mejor calidad de vida del paciente”, subraya.
Ella pone el ejemplo de alguien que se despierta de madrugada debido a un evento cardíaco. Si esa persona cuenta con un dispositivo de estas característcas, puede realizarse el electrocardiograma y, en caso de tener que ir al servicio de emergencia, acude con un registro fidedigno de su condición cardíaca para que los médicos tengan más elementos a la hora de la toma de decisiones.
Jornadas para conocer el nuevo método
Para que la mayor cantidad de personas se entere y se familiarice con esta metodología de telecardiología, la empresa que distribuye estos dispositivos organizará “Jornadas MiECG”.
De acuerdo a lo que explicaron desde la compañia, se pretende llegar a grupos de 200 personas a la vez, en reuniones que tendrán seis horas de duración. En esas instancias, la idea que es que todos quienes participan de la jornada prueben el método y se hagan un electrocardiograma, un procedimiento que, como se explica en la nota central, es sencillo de realizar y no lleva mucho tiemo. La iniciativa de organizar estos encuentros de difusión, está “orientada al chequeo o screening del corazón, principalmente para prevenir a una posible muerte súbita, buscando cardiomiopatía hipertrófica (complejo QRS) , patologías del QT, síndrome WPW y otras”, comunicaron desde la empresa.
La idea, se agregó, es comenzar con las “Jornadas MiECG” el mes que viene, y hacer dos de esos encuentros por mes, y en todos los departamentos del país por un período de seis meses. Por otra parte, estas instancias estarán dirigidas específicamente a jóvenes liceales de 15 a 18 años.
También se comunicó que se pueden poner en contacto con la compañía para proponer lugares grupos visitando la web oficial, o consultando por Whatsapp al 092-595 959.