Por Stephanie Bacque
Se cree que el caldo de huesos existe desde el comienzo de la humanidad. Los antropólogos afirman que las personas bebían líquidos infundidos con huesosy otras partes de animales desde tiempos prehistóricos.
El caldo de huesos —en inglés bone broth— es tan famoso gracias a sus propiedades. Se hace en base huesos de animales de pastura y vegetales orgánicos para mantener la calidad del producto y sus diversos beneficios.
Este líquido de cocción lenta, en frío tiene una consistencia gelatinosa por su alto contenido de colágeno. Se puede almacenar en el freezer y descongelar por porción para consumirse en el momento, conservando así todo su sabor y cualidades nutricionales.
El caldo de huesos contiene pequeñas cantidades del aminoácido glicina, que puede promover la relajación y un sueño más profundo y reparador.
Estudios han demostrado que una mayor ingesta de glicina, además, ayuda a reducir los síntomas de ansiedad, mejorar el rendimiento mental e incluso mejorar la memoria.
Es una excelente manera de obtener electrolitos, incluidos potasio, magnesio y sodio, que mantienen la energía y ayudan en las funciones musculares, nerviosas, digestivas y cognitivas.
El magnesio, por ejemplo, es conocido por ayudar a disminuir los dolores de cabeza, la inquietud, los espasmos musculares durante el sueño, los dolores musculares y las molestias digestivas.
El consumo de caldo de huesos ayuda a mejorar las funciones digestivas, es una fuente natural de colágeno, un tipo de proteína que se necesita para formar el tejido que forma el revestimiento del tracto gastrointestinal.
El colágeno protege y alivia el revestimiento del tracto digestivo y puede ayudar a curar el síndrome del intestino permeable, los síntomas del síndrome del intestino irritable y el reflujo ácido.
Cuando el colágeno se descompone, se forma gelatina, que se sabe que ayuda a las personas que padecen alergias alimentarias y sensibilidades a los alimentos, como la leche de vaca y el gluten.
La gelatina presente en estos caldos de huesos contiene aminoácidos “condicionales” llamados arginina, glicina, glutamina y prolina, que tienen ciertos efectos antienvejecimiento.
Además ayuda a desintoxicar el hígado y el sistema digestivo. El consumo de caldo de huesos es una forma efectiva de aumentar el suministro del antioxidante glutatión, uno de los agentes desintoxicantes más poderosos del cuerpo. La glicina es un precursor necesario para la producción de glutatión, que ayuda al hígado a eliminar el exceso de sustancias químicas, las hormonas almacenadas y otros desechos.
Suministra minerales importantes, debido a que el caldo de huesos está hecho de huesos y partes de animales que son fuentes concentradas de numerosos minerales, proporciona minerales y electrolitos, incluidos calcio, fósforo, magnesio, sodio, potasio, sulfato y fluoruro.
Debido a todas las características mencionadas, este alimento puede ayudar a prevenir un desequilibrio de electrolitos, la deshidratación que puede ocurrir durante un ayuno, fatiga, confusión mental, cambios de humor y espasmos o la debilidad muscular.
También es de buena ayuda para prevenir el desgaste muscular y puede contribuir con la recuperación muscular, reducir el dolor en las articulaciones (ya que se sabe que el colágeno combate los síntomas de la artritis) e incluso relajar los músculos tensos de una forma natural.
Además, esta comida hace que tu piel brille, ya que el colágeno ayuda a formar tejidos que se encuentran en la piel y le dan fuerza, suavidad, elasticidad y apariencia juvenil. De hecho, los estudios encontraron que una mayor ingesta de colágeno está asociada con mejoras en las funciones de barrera de la piel, mayor hidratación y reducción de los signos del envejecimiento, incluidas las arrugas, las líneas finas y la flacidez.
Aunque es probable que no notes ninguna mejora en unos pocos días, también se sabe que una mayor ingesta de colágeno disminuye la apariencia de la celulitis. La celulitis se desarrolla debido a la falta de tejido conectivo, que está hecho de colágeno.
Siempre tengamos en cuenta la bio-individualidad, los resultados de lo que ingerimos varían según cada individuo y demás está decir que ante dudas debe consultar con su médico de cabecera.
Para terminar, te dejo otras formas de usar el caldo de huesos: es bueno para añadir a cazuelas y así obtener más sabor y humedad; también para aliviar el dolor de garganta; o para beber entre comidas como colación.
Stephie Bacque
Es uruguaya, pero reparte su tiempo entre Montevideo y Buenos Aires y cambió radicalmente su vida convirtiéndose en health coach.
Su experiencia de vida, puede seguirse a través de la cuenta de Instagram .