Victoria Vera Ziccardi, La Nación/GDA
“El titular del antienvejecimiento es ridículo. Es un cuento de hadas. Pero lo que sí es real es tratar la piel de forma saludable. Y si bien es algo que aprendí para mi negocio, te hace sentir mejor”, reveló Brad Pitt a la revista Vogue a principios de este año. El actor asombra cada vez que se muestra públicamente porque luce unos 60 años nunca antes vistos: físico definido, sin cambios bruscos en su apariencia, piel sana y sin excesos de inyectables o el característico pillow face que se apoderó de los famosos en el último tiempo.
“Tengo una buena rutina de cuidado de la piel simple que me enseñó Jean Black, mi querida amiga maquilladora, con quien empezamos juntos hace 30 años y cada vez que estamos en una película, me dice: ‘probá esto o aquello’”, contó el protagonista de Troya a la publicación.
Hace poco tiempo fue captado por fotógrafos mientras filmaba una publicidad en la Riviera Francesa. El revuelo en las redes sociales fue inmediato, ¿podría ser que igual que el vino, Pitt mejora con el paso del tiempo?
Pitt destaca por seguir luciendo sus mismas facciones de siempre sin parecer otra persona ni haber cambiado radicalmente. No hay muchas diferencias si se compara una foto actual con aquel personaje de Tristan Ludlow que interpretó en 1994 en el drama Leyendas de Pasión. Aunque en reiteradas ocasiones ha revelado ser un adepto de las rutinas de ejercicio y un plan de alimentación saludable, para los profesionales de la estética es notable ver la ayuda de ciertos tratamientos estéticos no invasivos para mantener su buena apariencia.
Amish Patel, un profesional de la estética galardonado y experto en el cuidado de la piel de Intrigue Cosmetic Clinic reveló a un medio norteamericano que “Brad Pitt siempre ha sido un hombre atractivo con buena estructura ósea, pero recientemente parece que ha perdido el vello facial y tiene un nuevo peinado que le da una apariencia más contemporánea y juvenil”.
El especialista no considera que Pitt se haya sometido a una cirugía estética, pero es posible que se haya hecho algunos pequeños ‘retoques’ no invasivos. “Rellenos faciales como el de nariz y boca para suavizar las líneas o a lo largo de la línea de la mandíbula para afinar el perfil de la mandíbula son las más populares hoy en día entre hombres para refrescar el rostro”, aseguró.
Un estudio realizado por la Sociedad Estadounidense de Cirujanos Plásticos reveló que en 2018, unos 1.092.103 hombres eligieron someterse a procedimientos cosméticos mínimamente invasivos (botox, rellenos de tejidos blandos, tratamientos con láser), lo que refleja un aumento interanual del ocho por ciento.
Hombres e inductores de colágeno.
Desde los 25 años, los fibroblastos –tipo de células que contribuyen a la formación de tejido conectivo–van perdiendo gradualmente la capacidad de producción del colágeno, por lo que esa función de sostén de los tejidos disminuye y, al utilizar los inductores de colágeno se vuelve a recuperar. “Se los llama también bioestimuladores y son distintos tipos de tratamientos no invasivos que lo que buscan es estimular a la piel del paciente para que sintetice y genere más colágeno, lo que resulta en la estabilidad y sostenimiento de la piel”, asegura Augusto Barrera, cirujano plástico y director médico de Cala Medicina Estética.
“Actualmente está normalizado que el hombre se ocupe más de su estética, no diría que al mismo nivel de las mujeres, pero con certeza cada vez se animan más y especialmente a los tratamientos no invasivos”, revela el médico cirujano Cristian Corchuelo.
Según Corchuelo, la apariencia de Pitt puede estar vinculada al colágeno ya que existen muchas maneras de hacer tratamientos faciales (radiofrecuencias, rellenos, peelings, ácido hialurónico, tensores y estimulación del colágeno y elastina que son muy solicitados). “Naturalmente, con el paso de la edad, las fibras de colágeno y elastina disminuyen, y estos tratamientos estimulan la formación de colágeno y elastina para tensar la piel de manera más natural que un lifting”, explica.
¿A partir de qué edad se recomienda en hombres?
Según indican los especialistas, lo ideal es hacerlo si uno comienza a acomplejarse por el aspecto envejecido en la cara o siente que las arrugas son demasiado visibles. “Es fundamental que siempre individualicemos los tratamientos por parte de un médico experto, porque es importante valorar las necesidades de cada paciente. En general, recomiendo la implementación de bioestimuladores en los hombres a partir de los 30 años, principalmente cuando buscan mejorar imperfecciones de la piel como cicatrices de acné o incluso para redefinir algunos ángulos faciales”, asegura Patel.
Coincide con él Wanda Sabrina Stilman, médica especialista en Dermatología, quien además añade que el foco está puesto en la prevención por lo que cada vez hay más hombres y mujeres que comienzan con algunos de estos tratamientos de más jóvenes. “Al hacerlo logran mejorar aspectos de la piel, con resultados naturales y sin los riesgos que conlleva una cirugía”, dice.
No se recomienda su implementación en pacientes con enfermedades autoinmunes, trastornos de la coagulación o infección activa de la zona que se tratará. “Al ser un tratamiento que depende de la capacidad propia de producción de colágeno, los resultados pueden ser variables y tienden a ser menos llamativos en personas que de base tienen alguna condición que de por sí que disminuya la producción de colágeno, como hábitos de vida poco saludables o edad avanzada”, advierten los profesionales.
En una entrevista reciente, Pitt reveló que tiene una rutina de skincare en la que usa una crema y sérum que tienen una molécula llamada GSM10. El profesor Nicolas Lévy, uno de los principales científicos expertos en la progeria –un trastorno genético extremadamente raro que acelera el envejecimiento en niños– aportó información adicional en la investigación de esta molécula. según confirmó, es un poderoso antídoto contra el estrés oxidativo, responsable en gran parte de la descomposición del colágeno y la aparición los múltiples signos del envejecimiento.
“Los productos que menciona Brad Pitt funcionan mejorando ciertos aspectos de la piel, pero no son suficientes para lograr los mismos cambios que los tratamientos en consultorio médico. Estos activos, tan prometedores, pueden ser una buena combinación al aportar nutrición y protección celular, pero alguien como él no podría mantenerse de la forma en que ha llegado a sus 60 años solo con ellas”, explica Stilman.
Desde que el actor informó que en el pasado tuvo problemas de adicción con el alcohol, su vida cambió rotundamente. Manifestó públicamente que no bebe desde hace seis años y que eliminó las carnes de su dieta. No sorprende que la reducción del consumo de alcohol y de carnes rojas pueda beneficiar la salud, ya que son varios los estudios que respaldan estas opciones de estilo de vida como más saludables y benéficas para el organismo.
Asimismo, en más de una ocasión, ha confesado que como parte de esta nueva forma de vida saludable hace ejercicios cardiovasculares y rutinas fitness durante seis días a la semana. También se declara fan del té matcha, el jugo de arándanos y el agua con gas, bebidas conocidas por sus propiedades antioxidantes. “Tengo el tracto urinario más limpio de todo Los Ángeles”, confesaba la celebridad a la revista GQ.