El Tiempo / GDA
Los niveles de glucosa pueden variar en diversas ocasiones durante el día y observarlos es importante tanto si tiene diabetes como si no se la tiene.

Cabe destacar que la afección se diagnostica cuando una persona registra niveles de azúcar en la sangre muy altos, debido a que la insulina que produce su cuerpo no es suficiente como para descomponer el azúcar de los alimentos ingeridos, según ‘Medlineplus’.

Cuando la glucosa en la sangre aumenta más de lo normal, puede llegar a experimentar síntomas como sensación de sed, cansancio o debilidad, dolores de cabeza, visión borrosa e incluso puede aumentar la frecuencia en la que se dirige al baño para orinar.

Es importante recalcar que los niveles de glucosa que debe mantener dependen de si padece de diabetes o no, así como también del momento del día, puesto que antes de ingerir cualquier alimento, este debe mantenerse en menos de 100 ml/dl, de acuerdo con ‘Medical News Today’.

Cuando pase una hora o dos después de que haya comido, la glucosa debería estar en menos de 140 mil/dl, por lo que la muestra A1C que puede medir el promedio que presentó durante un periodo de 3 meses debería ser menor al 5.7 por ciento.

Foto: Freepik.

Pero estos niveles cambian en el caso de que padezca de diabetes, puesto que lo ideal, antes de consumir cualquier alimento, es que registre entre 80 a 130 ml/dl. Al pasar una o dos horas de tomar su almuerzo, cena o desayuno, lo ideal es que se mantengan en menos de 180 ml/dl.

Mientras que el periodo de tres meses que se debe obtener con la prueba A1C debería encontrarse entre menos del 7 por ciento, es decir menos de 180 ml/dl, según el medio especializado ‘Medical News Today’.

Cabe destacar que los objetivos no son iguales para todo el mundo, puesto que también dependen de la edad de la persona, la presencia de otras condiciones médicas, el estrés y los hábitos. Los mencionados anteriormente son los recomendados a nivel general; por esto debe consultar con un médico profesional que analice su situación.