Redacción El País
La adolescencia, una etapa de cambios profundos, puede ser un momento de alta vulnerabilidad emocional. Con trastornos como la ansiedad, la depresión o los problemas de conducta alimentaria en aumento, es vital que los padres actúen como guías y aliados en esta etapa crucial.
Aquí te presentamos siete herramientas imprescindibles para proteger la salud mental de tus hijos:
1. Entender los cambios de la adolescencia
Esta etapa está marcada por grandes reestructuraciones físicas, emocionales y sociales que afectan el comportamiento. Informarse sobre estos procesos, a través de fuentes confiables, permite a los padres comprender mejor lo que viven sus hijos y acompañarlos con empatía.
2. Promover hábitos saludables juntos
Los padres son el principal modelo a seguir. Adoptar y compartir rutinas como una alimentación equilibrada, actividad física regular y horarios de sueño adecuados fortalece la salud mental y física de los adolescentes. Cuanto antes se instauren estos hábitos, más fácil será mantenerlos a largo plazo.
3. Proveer herramientas de autogestión
Enseñar a los hijos a reconocer sus emociones, gestionar sus impulsos y afrontar retos es esencial. Este aprendizaje se logra con apoyo constante, diálogo y acompañamiento en sus logros y fracasos. Ayúdalos a explorar sus intereses y motivaciones mientras refuerzas su independencia.
4. Fomentar una comunicación activa
El diálogo empático y asertivo es fundamental para crear un ambiente de confianza. Escucha sin juzgar, respeta sus espacios y adapta tu comunicación a sus necesidades. Una relación abierta y respetuosa facilita que los adolescentes compartan sus preocupaciones.
5. Identificar señales de alarma
Cambios de humor repentinos, aislamiento, alteraciones en el sueño o la alimentación, y pérdida de interés en actividades habituales son posibles indicadores de problemas emocionales. Detectarlos a tiempo es clave para brindarles el apoyo necesario.
6. Prestar atención al entorno escolar y social
Dificultades académicas o rupturas en sus relaciones sociales pueden reflejar malestar emocional. Si estas señales persisten o afectan varias áreas de su vida, es importante buscar ayuda profesional.
7. Establecer límites tecnológicos
El uso excesivo de redes sociales puede impactar negativamente la autoestima y el bienestar emocional. Enséñales a manejar la tecnología de forma responsable, estableciendo horarios y promoviendo el equilibrio entre el mundo digital y las interacciones presenciales.
Problemas comunes en la adolescencia
- Ansiedad y depresión: Trastornos cada vez más frecuentes que afectan profundamente la calidad de vida.
- Trastornos alimentarios: La anorexia y la bulimia suelen emerger durante la juventud.
- Psicosis: Puede manifestarse al final de la adolescencia, con síntomas como alucinaciones o delirios.
- Suicidios y autolesiones: La cuarta causa de muerte entre jóvenes de 15 a 19 años, a menudo vinculada al abuso de sustancias, traumas o estigmas.
Cuidar la salud mental de los hijos no significa evitarles dificultades, sino darles herramientas para enfrentarlas. La combinación de hábitos saludables, comunicación abierta y vigilancia activa puede marcar una diferencia crucial. Si notas señales de alarma, no dudes en buscar el apoyo de especialistas: la salud mental merece la misma atención que cualquier otra área de la vida.
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