Desde la elección y el cuidado del cepillo dental hasta la técnica: cómo lavarse bien los dientes

Expertos en odontología explican cómo es el cepillado dental perfecto para tener una salud bucal óptima y una sonrisa brillante.

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Lavarse los dientes
Dos adultos lavándose los dientes.
Foto: Freepik.

Álvaro Heller y Carina Levy*

Los cepillos dentales son una herramienta clave para la rutina de higiene bucal. Al seleccionar uno, es importante tener en cuenta características que pueden influir en la efectividad y comodidad del cepillado.

Optar por un cabezal que se ajuste a la boca y permita llegar a todas las áreas de los dientes es fundamental. Los cabezales más pequeños y delgados suelen ser más precisos en la limpieza de zonas de difícil acceso.

Además, las cerdas del cepillo dental pueden ser suaves, medias o duras. Hace unas décadas, se aconsejaban los de cerda media e incluso dura, pero hoy se sabe que los de cerda suave son mejores para evitar lesiones de encías y proteger los dientes. Es importante elegir un cepillo dental con cerdas de alta calidad, resistentes y flexibles. Esto asegurará una limpieza efectiva y duradera. Otro aspecto clave es que las cerdas terminen en forma redondeada para eliminar las micro abrasiones.

A su vez, un mango ergonómico facilita el manejo y el control del cepillo dental.

Siempre es recomendable consultar con un odontólogo, quien podrá indicar cuál es el cepillo dental más adecuado según las necesidades específicas de cada persona, como la presencia de afecciones dentales o sensibilidad dental.

Consejos para cepillar bien los dientes.

Cepillarse los dientes correctamente es fundamental para garantizar la salud bucal. A continuación, se presentan algunos consejos:

1. Mantené el cepillo en un ángulo de 45 grados con respecto a la línea de las encías.

2. Realizá movimientos suaves y circulares en cada diente, asegurándote de cubrir todas las superficies (exterior, interior y masticatoria).

3. Evitá aplicar demasiada presión, ya que esto puede dañar el esmalte dental y las encías.

4. Dedicá al menos dos minutos a cada sesión de cepillado para garantizar una limpieza exhaustiva.

5. Evitá cepillar los dientes inmediatamente después de consumir alimentos ácidos (o realizá un buche con agua), ya que el ácido puede debilitar el esmalte dental.

6. No olvides incluir el uso del hilo dental y enjuague bucal como complementos del cepillado diario para obtener una higiene oral completa.

Se recomienda cepillarse los dientes al menos dos veces al día, preferiblemente después del desayuno y antes de acostarse. En algunos casos los cepillo interproximales son fundamentales. En cuanto a cepillar la lengua para eliminar las bacterias acumuladas, es un punto en discusión a nivel científico.

Cómo cuidar el cepillo dental.

Después de cada uso, enjuagá el cepillo dental con agua para eliminar los restos de pasta dental y saliva. Recordá también enjuagar el mango.

Una opción adicional es sumergir el cabezal en una solución de enjuague bucal antibacteriano durante unos minutos para eliminar los gérmenes. Luego, enjuagalo nuevamente con agua limpia y sacudí el exceso de agua antes de guardarlo.

Es importante que el cepillo dental se seque completamente antes de guardarlo. Colocalo en una posición vertical, con las cerdas hacia arriba, para permitir que se ventile. Evitá cubrirlo o guardarlo en estuches cerrados, ya que esto puede favorecer el crecimiento de bacterias.

¿Cuándo reemplazar un cepillo dental? Generalmente, se recomienda hacerlo cada uno a dos meses o cuando las cerdas estén desgastadas, deformadas o deshilachadas. Además, es importante considerar un reemplazo inmediato del cepillo dental después de una enfermedad oral, como una infección o un resfriado, para evitar una posible reinfección, así como después de cualquier procedimiento dental o si las cerdas se contaminan con algún agente externo.

En caso de utilizar un cepillo eléctrico, es posible que debas reemplazar solo el cabezal del cepillo a intervalos regulares, de acuerdo a las recomendaciones del fabricante o de tu odontólogo.

Cepillo de dientes eléctrico vs manual.

Hay dos opciones principales cuando se trata de cepillos dentales: manuales y eléctricos. El primer tipo es el más común y accesible en términos de precio. Viene en diferentes tamaños, formas y niveles de dureza de las cerdas, es fácil de transportar y no requiere baterías ni cargadores. Además, pueden usarlo personas con implantes dentales o prótesis fijas.

Con respecto al eléctrico, utiliza movimientos oscilantes o vibrantes para limpiar los dientes. Es especialmente útil para personas con movilidad reducida, y puede tener diferentes modos de limpieza y temporizadores para asegurar una adecuada duración del cepillado. Algunos modelos incluyen sensores de presión para evitar el cepillado excesivo y proteger las encías, y los que se basan en ultrasonido son mucho más eficientes.

*Doctores en Odontología y directores de la clínica odontológica BioSmile.

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