El Tiempo/GDA
Manchas rojas, inflamación, picazón, resequedad, son algunos de los síntomas de los eczemas o eccemas. También conocida como dermatitis, esta es la denominación genérica que se la a cualquier inflamación de la piel, por lo que las causas pueden ser diversas.

Generalmente, suele aparecer desde bebés, pero hay casos en los que se inicia más adelante y a partir de ahí se experimentan brotes a lo largo de la vida. Varios los factores que pueden causar esta patología, como la susceptibilidad genética, la disfunción de la barrera inmunitaria y epidérmica y factores ambientales.

Se habla de una mayor probabilidad de desarrollar dermatitis atópica si se tienen antecedentes familiares de dicha enfermedad de la piel, rinitis alérgica y asma. La gravedad de los episodios de irritación de la piel pueden depender del tipo de eczema que se tenga.

Las formas más comunes de dermatitis son la atópica, relacionada con las alergias; de contacto, producida al entrar la piel en contacto directo con determinados materiales o sustancias; seborreica, en el cuello y cara, del pañal, que le ocurre a los bebés por la humedad.

También está la neurodermatitis, que "se inicia con un picor en la piel que induce la necesidad de rascarse y es esta acción la que acaba por generar el eczema", explican en su blog y agregan que el estrés es uno de los factores de riesgo en estos casos.

El síntoma más común es la picazón, que puede ser más intensa para algunas personas que para otras.

El sarpullido puede aparecer en varias partes, como las zonas con pliegues: las rodillas, los codos, el cuello, entro otras.

Rascarse puede hacer que la zona sangre o secrete líquido. Asimismo, puede causar manchas secas en la piel con un color entre rojo y café oscuro y el engrosamiento de la misma con costras.

También se pueden formar pequeñas ampollas o vesículas que se rompen y exudan.