Mariana Sánchez, El Universal/GDA
Hacer ejercicio físico de forma regular y reducir el sedentarismo es beneficioso para la salud, afirman los expertos. El Ministerio de Salud de Argentina añade a esto que cualquier cantidad de actividad física que se realice es beneficioso ya que lo ideal es reducir los largos períodos de tiempo que se pasa sentado.

Desde los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos remarcan la importancia de hacer cuatro tipos de ejercicios: resistencia, fortalecimiento, equilibrio y flexibilidad. Al respecto, afirman que cada uno tiene diferentes beneficios y hacer un tipo también puede mejorar la capacidad para hacer los otros.

Las articulaciones del cuerpo humano son las uniones entre dos o más huesos. Como tal, tienen tejidos blandos que los rodean, como cartílagos, tendones y ligamentos que pueden sufrir lesiones o enfermedades, debido al uso excesivo, o lesiones repentinas como puede ser un accidente o una lesión deportiva. Es en este sentido que el Instituto Mayo Clinic plantea que practicar ejercicio aumenta la fuerza, facilita el movimiento, reduce el dolor en las articulaciones y ayuda a combatir el cansancio. Además, precisa que los ejercicios correctos pueden mejorar la salud y el estado físico sin lastimar las articulaciones, y si se combina con un programa de tratamiento puede aportar calidad de vida.

En torno a lo señalado es que aparece el método Feldenkrais, una técnica de aprendizaje que se enfoca en la autoconsciencia del cuerpo combinado con ejercicios físicos para mejorar la función motora, la flexibilidad y la coordinación. Para esto, la técnica toma partes del conocido mindfulness, un tipo de meditación que consiste en prestar atención al momento presente de manera intencional.

Este innovador método puede colaborar en la recuperación de lesiones en las articulaciones. Fue desarrollado en 1940 por el doctor Moshé Feldenkrais que buscaba tratar una lesión crónica en su rodilla. Fue así que creó una técnica que apunta a la realización de movimientos conscientes y suaves ejercicios con el objetivo de reducir el dolor al moverse de una manera más eficiente.

El método Feldenkrais se realiza por etapas y la primera se basa en movimientos lentos y sencillos. Luego un profesional trabaja con el paciente en una camilla, con el fin de identificar y eliminar malos e inconscientes hábitos que terminan entorpeciendo las acciones simples de las articulaciones del cuerpo. “Es un método de aprendizaje que sirve para mejorar la postura, aliviar dolores crónicos y el estrés”, remarca Susana Born, profesora del método Feldenkrais.

Foto: Natalia Elizabeth Fernández.