El Reino Unido prohíbe publicitar la intervención quirúrgica "lifting de glúteos brasileño"

O Globo - GDA
El órgano regulador del Reino Unido prohibió los anuncios de seis empresas sobre el Brazilian butt lift (BBL, o "lifting de glúteos brasileño"), un procedimiento que moldea la forma de los glúteos. Según la Advertising Standards Authority (ASA), las campañas publicitarias, difundidas en redes sociales, explotan la inseguridad de las mujeres y las presionan a agendar una consulta.

A diferencia de lo hecho por estas marcas, el organismo destaca que la cirugía estética debe presentarse como una decisión que requiere tiempo y reflexión, y no como una urgencia para agendar rápidamente y cerrar un trato, debido a los riesgos que implica.

En septiembre de 2024, la británica Alice Webb murió en el Reino Unido tras someterse al procedimiento. Dos personas fueron arrestadas después de su muerte, incluido el cirujano que realizó la operación. Se estima que, desde 2019, al menos 20 mujeres británicas han perdido la vida al realizarse el BBL en Turquía.

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El objetivo principal del BBL es extraer grasa de una zona del cuerpo e inyectarla en los glúteos para darles un aspecto más redondeado, voluminoso y terso. De ahí que el nombre se inspire en el cuerpo de las brasileñas.

La cirugía consiste en extraer, mediante liposucción, grasa de áreas como los brazos, flancos, caderas, cintura, abdomen, parte interna de los muslos y "pantalones de montar", para luego injertarla en zonas seleccionadas de los glúteos. Normalmente, se coloca en las áreas superiores, laterales y en el surco interglúteo (entre las dos nalgas), regiones con menos vasos sanguíneos, lo que reduce el riesgo de una embolia grasa.

El tejido se inyecta en el tejido subcutáneo y, en pocos casos, en pequeñas cantidades dentro del músculo. También hay un límite para el volumen de grasa —máximo 400 mililitros por nalga—, y el injerto se realiza con cánulas finas de entre 10 y 50 centímetros.

Muchas de las víctimas que se sometieron a esta cirugía sufrieron una embolia grasa, una condición en la que parte de la grasa ingresa a los vasos sanguíneos y se aloja en los pulmones y el corazón, causando muerte súbita. Esta es la principal causa de muerte relacionada con el procedimiento. Otros problemas asociados son la sepsis y la formación de coágulos.

En Estados Unidos, de cada 3.000 cirugías de injerto glúteo, al menos una resulta en muerte. Esta tasa de mortalidad es la más alta entre cualquier procedimiento estético.

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Un procedimiento alternativo recomendado por médicos británicos como alternativa al BBL —por considerarse más "ligero" y menos peligroso— es el lipofilling glúteo superficial (SGL, por sus siglas en inglés). La diferencia es que, a diferencia del BBL, el SGL inyecta grasa en las capas más superficiales de la piel, sin riesgo de que esta llegue a los músculos, lo que podría causar una embolia grasa.

En 2022, la Asociación Británica de Cirujanos incluyó el SGL en sus directrices y enfatizó que los cirujanos deben asegurarse de que los pacientes que buscan este tipo de procedimiento tengan "expectativas realistas" y estén informados sobre los riesgos.