La Nación/GDA
Los perros, más allá de la raza a la que pertenezcan, tienen una gran capacidad auditiva que los humanos no logramos siquiera imaginar.

Eduarda Piamore, técnica especializada en psicología, educación y adiestramiento canino y felino, indicó cuáles son los seis sonidos a que los canes son especialmente sensibles.

• Pasos y llaves a distancia

Los perros pueden escuchar sonidos producidos a más de 25 metros de distancia. Esto incluye el tintinear de las llaves o el sonido de los pasos, alertándolos de su llegada mucho antes de que lo vean.

• Silbatos ultrasónicos

Estos dispositivos, utilizados comúnmente en el adiestramiento, emiten frecuencias ultrasónicas inaudibles para el oído humano

• Vibraciones subterráneas

Los perros no solo captan sonidos aéreos, sino también terrestres. Su capacidad para detectar vibraciones les permite anticipar desastres naturales como terremotos o tsunamis.

• Movimientos de presas

Los perros utilizan su oído para identificar y localizar presas. Desde el roce de un ratón en el suelo hasta el vuelo de un pájaro, ningún sonido es demasiado sutil para un perro entrenado.

• Sonidos de la naturaleza

Los perros son capaces de oír sonidos como el fluir del agua, el batir de alas de las aves o, incluso, el zumbido de los insectos.

• Latidos cardíacos

Los perros pueden detectar los latidos del corazón sin necesidad de equipos especializados. Esto les permite percibir emociones humanas como el miedo o la ansiedad.

Además de sus destrezas, los perros son los mejores amigos del ser humano, sobre todo porque forman parte de la familia y nos acompañan a donde quiera que vayamos. A medida que crecen, su percepción comienza a desarrollarse y una de las preguntas más frecuentes es cuánto tiempo pueden recordar a sus dueños en caso de que sufran alguna pérdida.

A raíz de aquel cuestionamiento, los especialistas comenzaron a indagar sobre los comportamientos de los perros para entender cómo funciona su psiquis. Según un estudio de la Universidad Estatal de Pensilvania, los canes poseen la memoria de corto y largo plazo.

En cuanto a la de corto plazo, los científicos explicaron que consta de un proceso de dos a cinco minutos donde estos animales domésticos son capaces de solo registrar el presente sin recordar algún hecho pasado que denote importancia para ellos. Un ejemplo que establecieron, es cuando ellos reaccionan de manera exaltada al ver a sus dueños ingresar por la puerta de la casa, a pesar de haberlos visto hasta hace unos minutos.

Por otra parte, la de largo plazo, que está relacionada con circunstancias más significativas que dejan una huella en el animal, como por ejemplo las imágenes, ruidos, olores o algún hecho sensorial que ellos consideren relevante.

En ese sentido, es importante mencionar que los perros recordarán por siempre a su amo debido al vínculo emocional que se gestó. Si el dueño fallece, el perro seguirá conectado psicológicamente con él por guardar su rostro y recordar sus olores, como así también las vivencias.