El Tiempo/GDA
Llevar una dieta equilibrada para nutrir el cerebro es fundamental. "En general, una dietavariada, que incluya alimentos frescos, frutas, verduras y legumbres, nos aportará los nutrientes esenciales para proteger y tonificar nuestro sistema nervioso central", señala la nutricionista Dirdi Nariño.
Una de las principales recomendaciones es consumir frutas ricas en antioxidantes, como los arándanos y las frutillas, ya que estos componentes ayudan a reducir el estrés oxidativo en el cerebro, lo que podría mejorar el rendimiento cognitivo.
Otra opción son las verduras de hoja verde, como la espinaca y la col rizada. Estas verduras contienen altos niveles de vitaminas y minerales que pueden apoyar la salud cerebral. En particular, la vitamina K, que se encuentra en abundancia en estos alimentos, ha sido asociada con una mejor función cognitiva.
La palta es otro alimento que los expertos sugieren incorporar en la dieta. Es una buena fuente de grasas saludables, que son esenciales para mantener la estructura de las células cerebrales. Además, la palta contiene vitamina E, un antioxidante que podría ayudar a proteger las células cerebrales del deterioro.
Las nueces y semillas también son recomendadas por los nutricionistas debido a su contenido de ácidos grasos omega-3. Estos compuestos son fundamentales para la salud del cerebro y pueden influir positivamente en la memoria y el enfoque. A largo plazo, una dieta rica en estos alimentos podría ser una forma natural y efectiva de apoyar el rendimiento mental.
Además de las frutas y verduras, Nariño destaca otro tipo de alimentos que también son esenciales. "El atún, salmón, robalo, mero, sardinas, etc., son fuente importante de ácidos grasos Omega 3 que protegen y favorecen la formación de los cuerpos y axones (colas) de las neuronas. Por lo que se favorece el flujo de información entre ellas, esto contribuiría a la buena memoria. El Cerebro es 60% materia grasa, y sin 'grasas buenas' no puede transmitir impulsos eléctricos de buena calidad", asegura.
Para ella, los alimentos de origen marino son fuente de calcio (transporte de impulsos nerviosos) y fosforo: de este depende, por ejemplo, el estar atento y tomar rápidamente decisiones. También está el hierro que facilita el transporte de oxígeno neuronal y cuando está muy bajo en nuestro organismo provoca cansancio. Y, finalmente, otras vitaminas como la E que evita la oxidación que la grasa saturada produce, la cual es totalmente bueno para en la memoria.