Redacción El País
Parece ser que el sueño de las personas sedentarias está a punto de cumplirse: una pastilla imitará los efectos de hacer ejercicio. El fármaco —hasta ahora probado en ratones— imita los efectos de hacer deporte, ayuda a perder peso e incrementa la actividad muscular.
El trabajo de investigación fue realizado por investigadores de la Universidad de Florida, (EEUU), quienes con el nuevo compuesto lograron que ratones obesos disminuyeran su peso. Pastilla mediante, estimulan el metabolismo y “convencen” a los músculos del cuerpo de están ejercitándose. Como si fuera poco, los ratones a los que se les suministró la droga aumentaron en un 50% su resistencia.
El fármaco es de la clase bautizada "miméticos del ejercicio" y proporciona algunos de los beneficios de esa práctica, sin requerir actividad física. En las primeras fases de desarrollo, el nuevo tratamiento algún día podría probarse en personas en el tratamiento de enfermedades tales como la obesidad, diabetes y la pérdida muscular (relacionada con la edad).
Remedios que atacan la obesidad
La investigación de EE.UU se suma a la revolución de fármacos que atacan la obesidad. Compuestos como 'Ozempic' (que ayuda a reducir el nivel de azúcar en sangre y a perder peso) ya han ayudado a reducir el apetito y se utilizan en el tratamiento de enfermedades metabólicas.
El fármaco en investigación es conocido como SLU-PP-332, no altera el apetito ni la ingesta de alimentos y no hace que los ratones hagan más ejercicio. Sí estimula una vía metabólica natural que normalmente responde al ejercicio. Lo que logra el nuevo compuesto es que el cuerpo actúe como si estuviera entrenando para una carrera, lo que genera mayor gasto de energía y el metabolismo más rápido de la grasa en el cuerpo.
El estudio y sus credenciales
La investigación fue realizada por un equipo de investigadores de la Universidad de Washington en St. Louis y de la Universidad de St. Louis. Sus resultados preliminares se publicaron en el 'Journal of Pharmacology and Experimental Therapeutics'.
El fármaco actúa sobre un grupo de proteínas conocidas como ERR, las responsables de activar algunas de las vías metabólicas más importantes en los tejidos que consumen energía, como los músculos, el corazón y el cerebro.
Los ERR son más activos cuando las personas hacen ejercicio, pero ahora la última investigación constató que el fármaco funciona: los ratones obesos comieron lo mismo y no hicieron más ejercicio. "Usan más energía simplemente viviendo", señaló el líder del estudio. Los investigadores han detectado evidencia de que el compuesto también puede emplearse en ratones para tratar la insuficiencia cardíaca.
El siguiente paso en el desarrollo de SLU-PP-332 será refinar su estructura, idealmente haciéndolo disponible en forma de píldora en lugar de inyección. Luego, podría probarse para detectar si causa efectos secundarios en más modelos animales antes ensayarse en humanos.