Un punto muy importante de nuestra casa es la puerta de entrada. Debemos tenerla cuidada porque por ella ingresará nuestra prosperidad y abundancia. Es importante atender la protección, limpieza y funcionamiento de la puerta de acceso de nuestro hogar.

Es sumamente importante tener presente y ser conscientes que lo primero que vemos al llegar a nuestro hogar es su puerta. Eso dice mucho de la energía que tenemos dentro de nuestros espacios, y por tanto, de la energía con la cual convivimos día a día. Seamos conscientes que los responsables por cuidar esa energía somos nosotros mismos, con la forma que dedicamos tiempo y cariño al espacio donde vivimos.

La puerta de entrada es una parte muy importante para el Feng Shui y un buen lugar para comenzar a hacer cambios en tu decoración si querés potenciar distintas áreas de tu vida y alcanzar tus metas.

La puerta de acceso debe tener guardianes que protejan la sabiduría y la energía del hogar. Estos deben ser elementos dispuestos a los lados de la puerta principal, simétricos, para dar estabilidad a ese espacio. Si les gusta la decoración oriental, podría ser la colocación de perros Fu, de no ser así, puede usarse plantas como la lavanda o el romero. También puede utilizarse algún móvil que me active la energía al ingresar al hogar. Debo entrar a mi templo con una actitud positiva.

Al llegar a casa debemos evitar encontrar un espacio desordenado, carente de elementos, como un rincón en desuso o descuidado. No es beneficioso tener frente a mi puerta de entrada la puerta de un baño, una escalera o el comedor, ya que generarán en nuestro interior puntos de energía conflictiva. Pero tranquilos, todos estos puntos tienen solución.

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Si lo que tenés frente a tu puerta de entrada es la puerta del baño, buscá de colgarle, a esta última, algo rojo o multicolor, de manera de agregar ese elemento fuego en esa puerta para protección. Si lo primero que ves al llegar es una escalera, buscá que ese espacio no tenga cosas acumuladas debajo, colócale plantas, preferentemente de hojas redondeadas. Para el caso del comedor, es beneficioso de buscar cambiarlo de lugar y si no podés hacerlo, buscá la forma que las sillas no queden de espalda a la puerta de entrada, ya que tus invitados se sentirán inseguros en el momento de compartir esa mesa contigo.

Al llegar a casa, debo ver un espacio que me permita despojarme de las cosas que traigo desde el exterior, ya sean carteras, bolsos o zapatos. Ese lugar debe tener detalles armoniosos y elementos bien pensados que inviten a entrar. Estos detalles pueden ser: plantas, el felpudo, un espejo, algún adorno con el cual conectes y te suba la vibración energética, un cuadro, una frase que te guste leerla, un retrato que quieras que te espere, una lámpara de sal para que no esté ese rincón oscuro o cualquier otro objeto que sientas que te de tranquilidad y equilibrio al entrar a tu hogar.

Te pregunto: ¿te has parado a observar cómo está la entrada de tu casa?; ¿Qué es lo que te da la bienvenida al volver a tu espacio? Recordá que tu casa te esperará de la misma forma que la tratas; cuídala, ámala y dale energía vital para recibir lo mismo de ella. Generando armonía en mi presente logro el futuro próspero que deseo.