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El nanche es una fruta de color amarillo que tiene un sabor agridulce y un gran aporte de vitaminas que ayudan al organismo.

Este fruto es conocido por ser fuente de vitamina E, que funciona como antioxidante y de vitamina C que ayuda a proteger y fortalecer el sistema inmune. Así mismo, el nanche contiene vitamina K, encargada de la correcta coagulación de la sangre.

Según el instituto de investigación sobre la salud Linus Pauling, esta fruta contribuye a la fotoprotección, disminuye el fotodaño y es necesario para la adecuada cicatrización de las heridas.

Según el Ministerio de Salud de México, los altos contenidos proteicos, el nanche pueden contrarrestar infecciones gastrointestinales, enfermedades de la piel y padecimientos degenerativos. Adicional a esto, al ser proveedor fibra y carbohidratos, fortalecer las defensas, mejorar la digestión y aliviar los resfriados.

Por su parte, un estudio publicado en 'Journal of Ethnopharmacology' evaluó la capacidad antioxidante y antimicroniana del nache, como resultado se arrojó que este alimento ayuda a combatir bacterias como Staphylococcus aureus y Escherichia coli.

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Su alto contenido de hierro y vitamina K ayudan a las personas que tienen deficiencia de glóbulos rojos y presentan anemia; de la misma manera, ayuda a reducir el daño oxidativo en las células y tejidos, lo que puede prevenir enfermedades del corazón gracias a su aporte de antioxidantes y vitamina C.

El calcio y el fósforo presente en estas frutas, ayuda a mantener la densidad ósea y prevenir enfermedades como la osteoporosis. Su aporte de vitamina A también ayuda a la salud ocular.

El nanche hace parte de la familia Malpighiaceae; por lo tanto, está relacionada con la acerola, una fruta similar a las cerezas. Si usted es alérgico a estas frutas, es mejor que evite su consumo, ya que podría presentar síntomas adversos.