O Globo - GDA
Existen dos tipos de tejido adiposo o graso: blanco y marrón. El tejido adiposo blanco almacena principalmente energía, mientras que la grasa marrón (cuyas células tienen más mitocondrias, lo que les da su tonalidad marrón) es responsable de generar calor o termogénesis, un proceso que mantiene la temperatura corporal y se activa por el frío u otros estímulos.
Ahora, científicos como Guadalupe Sabio, líder del grupo de Enfermedades Metabólicas del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), y Cintia Folgueira, del CNIO y del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), han descubierto una de las maneras en que el cuerpo "quema" grasa marrón y la convierte en calor.
Este mecanismo protege contra la obesidad y enfermedades metabólicas relacionadas. Está controlado por una proteína llamada MCJ, presente en las mitocondrias (orgánulos de la célula donde se produce la energía).
Sabio y Folgueira descubrieron que, al eliminar la proteína MCJ en ratones obesos, estos animales producían más calor y perdían peso. Los investigadores también lograron reducir el peso de ratones obesos trasplantándoles grasa que carecía de esta proteína.
Estudios que confirman la importancia de la grasa marrón
Varios estudios de la última década han mostrado que activar la grasa marrón protege contra la obesidad y las enfermedades metabólicas. "Durante un tiempo se pensó que la obesidad podría prevenirse haciendo que esta grasa gastara más energía generando calor. Por eso, lo primero es entender cómo funciona”, explica Sabio. “Descubrir nuevos mecanismos de producción de calor en la grasa marrón es uno de los objetivos más interesantes en el estudio de la obesidad”.
Evitar patologías asociadas a la obesidad
"Los animales sin MCJ en la grasa marrón están protegidos contra problemas de salud causados por la obesidad, como la diabetes o el aumento de lípidos en sangre", explican los dos científicos. Por ello, creen que la proteína MCJ puede convertirse en un nuevo objetivo terapéutico para tratar enfermedades asociadas a la obesidad.
"Esta protección", detalla Beatriz Cicuéndez, investigadora del CNIO y autora principal del estudio, "se debe a la activación de una vía de señalización esencial para adaptarse al estrés causado por la obesidad. Conocida como vía catabólica, provoca un aumento en el consumo de grasas, azúcares y proteínas para generar calor en la grasa marrón. Es un mecanismo que también ocurre en personas con grasa marrón muy activa”.
Actualmente, los investigadores buscan desarrollar una terapia para bloquear esta proteína en pacientes obesos, aunque primero deben investigar si la proteína MCJ tiene funciones vitales en otros tejidos.