O Globo - GDA
Pasar largos períodos sentado aumenta en un 16% el riesgo de morir prematuramente. Así lo indica un estudio realizado por investigadores de la Universidad Médica de Taipei, en Taiwán, y publicado en la revista científica JAMA Network Open.
Los científicos analizaron los resultados de salud de casi 500,000 personas durante 20 años y encontraron otros tipos de enfermedades.
También se encontró que el riesgo de muerte por enfermedades cardiovasculares aumentaba un 34% entre aquellos que pasaban más tiempo sentados.
Para el nuevo estudio, los investigadores analizaron datos de salud en relación con el trabajo, el nivel de actividad física y otros factores de estilo de vida de 481,688 personas.
Seguían los resultados de salud a lo largo de dos décadas y ajustaban por sexo, edad, tabaquismo, consumo de alcohol e índice de masa corporal (IMC), que evalúa si la persona tiene sobrepeso u obesidad.
Constataron que las personas que llevaban un estilo de vida "combinado" —aquellas que alternaban entre períodos de estar sentadas y "no sentadas" en el trabajo— no presentaban un riesgo aumentado de mortalidad. Por otro lado, aquellos que tenían un estilo de vida profesional sedentario, es decir, que pasaban mucho tiempo sentados pero también hacían ejercicio físico durante su tiempo libre, mostraban un riesgo reducido de mortalidad, tanto por todas las causas como por enfermedades cardiovasculares.
Los científicos señalan que el aumento del riesgo de muerte y enfermedades cardíacas puede ser compensado con 15 a 30 minutos de ejercicio vigoroso al día.
Durante los 20 años del estudio, se produjeron un total de 26,257 muertes, de las cuales 15,045 —aproximadamente el 57%— ocurrieron entre las personas que pasaban más tiempo sentadas en el trabajo. Entre los fallecimientos, 5,371 estuvieron relacionados con enfermedades cardiovasculares, y el 60% (3,234) de ellos ocurrieron en el grupo predominantemente sentado.
Las conclusiones del estudio sugieren que los riesgos asociados al tiempo prolongado que se pasa sentado en el trabajo pueden ser mitigados mediante la incorporación de pausas regulares y la práctica de actividad física adicional. "Cambios sistémicos, como pausas más frecuentes, escritorios de pie, áreas de trabajo designadas para actividades físicas y beneficios de inscripción en gimnasios, pueden ayudar a reducir el riesgo", escribieron los autores en el estudio.
"Como parte del estilo de vida moderno, el tiempo prolongado en el trabajo se considera normal y no ha recibido la atención adecuada, aunque se ha demostrado su efecto perjudicial en los resultados de salud", dijo el autor principal, Wayne Gao, de la Universidad Médica de Taipei, en un comunicado. "Nuestros hallazgos sugieren que reducir la permanencia prolongada en el lugar de trabajo y/o aumentar el volumen o la intensidad de la actividad física diaria puede ser beneficioso para mitigar los riesgos elevados de mortalidad por todas las causas y enfermedades cardiovasculares asociadas con la permanencia prolongada en el trabajo".