Los cosmetólogos médicos y sus pacientes esperan con muchas ansias el invierno. Esta estación es clave en cuanto a la evolución de los tratamientos que todos anhelan.
En la época de frío estamos menos tiempo al aire libre y se evita una exposición solar tan marcada como la de los meses de más calor y sol.
Ocuparse de la piel en este momento brinda a ambas partes mayor tranquilidad a la hora de realizar tratamientos más profundos, que generan cambios importantes en la piel. El invierno es la estación ideal para actuar y reducir las probabilidades efectos secundarios no deseados.
La cosmetóloga médica está capacitada para implementar diversos tratamientos en el consultorio para tratar cualquier motivo de consulta.
Lo básico es una higiene facial, lo que llamamos cotidianamente limpieza de cutis, un tratamiento que puede realizarse en todo el año y tiene diversas características (dependiendo del paciente y del mes que se cursa).
El puntapié inicial de todo procedimiento es higienizar la piel, renovarla y planificar el tratamiento en domicilio. Sin importar la época del año en curso, la higiene es la base de todo proceso que se inicia en el consultorio.
Objetivos
Apostar a tratamientos en invierno busca una renovación importante de las primeras capas de la piel, sobre todo enfocado en lo que es melasma, manchas post inflamatorias, secuelas de acné y cicatrices, más allá del tipo de piel del paciente.
Estos procedimientos intentan mejorar la luminosidad, la calidad y hacer menos perceptibles el tamaño de los poros de la piel. A largo plazo, los tratamientos mejoran la hidratación de la piel y el envejecimiento.
Luego de los tratamientos, es necesario disminuir al mínimo la exposición solar y mantener muy bien hidratada la barrera de la piel.
Ambas cuestiones son fundamentales y los especialistas siempre las explican para que se siga con éxito la rutina domiciliaria.
Tratamientos
“Si el paciente está interesado en renovar su piel en profundidad, el invierno es el momento del año ideal”, considera Eugenia Posente, cosmetóloga médica, columnista de Bienestar.
Diversos tipos de ácidos se emplean con este objetivo, según el resultado deseado y de las características de piel del paciente. La vedette del invierno es el peeling.
“En esta época del año solemos realizar peelings con ácido retinoico, es un peeling bastante profundo, hace una renovación celular importante y genera muy buenos resultados en cuanto a hiperpigmentaciones, secuelas de acné y orificios pilosebáceos, es decir, poros que son muy evidentes”, explica.
Este tratamiento trabaja muchísimo en el envejecimiento de la piel y es fundamental hacerlo en esta época porque genera un poco de inflamación, enrojecimiento y hay una descamación evidente.
“Es una opción muy buscada por los pacientes y se planifica meticulosamente porque hay que explicarles muy bien qué hacer antes, durante y después del proceso. Es fundamental estar lo menos expuesto posible al sol”, agrega.
En otro tipo de peeling se aplican ácidos que no generan esta descamación pero igual producen una renovación bastante importante y por mayor seguridad, también se hacen en invierno.
Los peelings se usan durante todo el año, algunos en ciertas concentraciones se limitan a estos meses por precaución; de hecho el con ácido retinoico es uno de los tratamientos más realizados y más pedidos en este momento.
“Otro tratamiento que es adecuado iniciar ahora es el llamado dermapen o micro nidly. En esta técnica, se utiliza un dispositivo al cual se le colocan agujas y va a la piel con un activo que genera pequeños microcanales. Esos activos penetran en profundidad y este tratamiento genera en la piel enrojecimiento e inflamación y de ahí la importancia de hacer en este momento por lo menos las primeras sesiones”, desarrolla Posente.
La profesional también recuerda que este momento es el mejor para iniciar la depilación láser en el rostro. Así hay seguridad de cómo la piel tolera esta técnica y no existe el problema de la exposición solar.
Otros tratamientos pueden hacerse en conjunto con médicos dermatólogos como, por ejemplo, láser o luz pulsada para alguna patología como melasma, manchas, acné, rosácea. Durante el resto del año pueden realizarse diversos procedimientos y tratamientos domiciliarios.
Profesionales
“Siempre marco la importancia de tener a principio de año una consulta para planificar qué tratamientos haremos durante el resto de los meses, así podemos aprovechar al máximo los tiempos de menor exposición solar y encararemos procedimientos más intensos, sin tener ningún efecto secundario no deseado”, puntualiza Posente.
Es clave remarcar la importancia de otros productos que se utilizan en domicilio también preferentemente en invierno. Ácidos, retinoides, despigmentantes que generalmente en verano suelen suspenderse, para que no generen ningún tipo de sensibilidad, ahora se retoman como parte de la rutina para aprovechar al máximo sus beneficios.