Sofía Arias Martínez, El Tiempo/GDA
Cuidar los dientes y las encías puede ayudarnos a prevenir enfermedades graves. Pero, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la salud bucal es mucho más: “Permite a las personas realizar funciones esenciales como comer, respirar y hablar, y abarca dimensiones psicosociales como la confianza en uno mismo, el bienestar y la capacidad de socializar y trabajar sin dolor, molestias ni vergüenza".
Una señal de la alerta son las encías sangrantes. Según informó MedlinePlus, la principal razón por la que sangran las encías es la acumulación de placa en el borde de las encías. Esto puede causar gingivitis.
Si la placa no se elimina a tiempo, se endurece y convierte en sarro. Esto puede empeorar el sangrado y provocar una enfermedad periodontal más grave, llamada periodontitis, que también afecta al hueso de la mandíbula.

De acuerdo con la Clínica de Cleveland, si sus encías sangran por más de dos semanas o si presenta síntomas adicionales como mal aliento o inflamación, debe consultar con un profesional de la salud.
"El sangrado de encías puede empeorar con el tiempo si se ignora, especialmente si la causa es una enfermedad periodontal. Si no se trata, la enfermedad periodontal erosiona el tejido, los ligamentos y el hueso que sostienen los dientes. Esto puede provocar un ciclo continuo de infecciones, mal aliento e incluso la pérdida de piezas dentales", explicó.
MedlinePlus compartió la siguiente lista de recomendaciones para tratar las encías sangrantes:
- Visite al dentista al menos casa seis meses.
- Cepíllese los dientes al menos dos veces al día.
- Cepíllese después de cada comida.
- Use hilo dental dos veces al día.
- Siga las recomendaciones de su dentista.
- Hágase un examen periodontal.
- No consuma tabaco.
- Siga una dieta saludable y balanceada.