Por qué suenan las articulaciones: las claves detrás de si está bien o mal tronar los dedos

Especialistas explican qué pasa con el ruido articular y dejan recomendaciones para cuidar la salud de las articulaciones del cuerpo.

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Tronar los dedos
Mujer haciendo tronar sus dedos.
Foto: Freepik.

Cuando pensamos en la salud de nuestro cuerpo, solemos hablar de órganos, músculos y huesos, hasta que, de pronto, escuchamos un ¡crac! No, no estamos rotos: es el chasquido de alguna articulación. ¿Por qué suenan las articulaciones? ¿Es bueno o malo? El País conversó con dos expertos para responder estas y otras preguntas.

Las articulaciones actúan como puntos de unión entre los huesos y facilitan los movimientos mecánicos del cuerpo. Según el médico reumatólogo Daniel Palleiro, existen tres tipos de ruidos articulares: roces, crujidos y chasquidos. Los que escuchamos son los chasquidos, mientras que los otros no son audibles.

La diferencia entre un roce y un crujido tiene que ver con la intensidad: el primero es mínimo y el segundo es “más severo”, explicó Palleiro, y agregó que ambos se producen cuando la superficie de las articulaciones se vuelve rugosa y áspera como consecuencia de un proceso degenerativo; por ejemplo, una artrosis. “Eso hace que dos superficies ahora rugosas, al estar moviéndose una sobre la otra, rocen o crujan”, indicó.

Ahora bien, ¿qué pasa con los chasquidos? El sonido resulta de extender bruscamente las articulaciones, señaló el reumatólogo, y no tiene por qué estar asociado a una patología. A veces se producen porque hay un tendón enganchado a un saliente óseo: “Pasa, por ejemplo, cuando la persona está sentada y quiere pararse; pueden engancharse los tendones y, sin que haya dolor, siente el ruido”.

Hay chasquidos que son totalmente naturales, como sucede con los pacientes hiperlaxos. “Genéticamente, tienen un rango de movilidad mayor porque sus ligamentos son más elásticos, y por mover más la articulación, más les suena”, expuso Palleiro. Puede suceder, por ejemplo, cuando suben y bajan escaleras.

¿Hace bien tronar las articulaciones?

Santiago Beretervide, médico especialista en Medicina del Deporte, sostuvo que los chasquidos de las articulaciones, “si no están acompañados de dolor o limitación al movimiento, son totalmente normales”. En este sentido, el sonido aislado no es indicador de una enfermedad.

Palleiro estuvo de acuerdo. Cuando el origen del ruido articular es patológico, como en el caso de una artrosis, el paciente también experimenta dolor y limitación funcional, afirmó.

¿Y qué pasa cuando uno genera el chasquido a propósito? “En realidad, no está ni bien, ni mal”, dijo el reumatólogo, y continuó: “Mucha gente busca el acomodo de las articulaciones para sentirse mejor. Nadie tendrá o dejará de tener una artrosis por sacarse las mentiras de los dedos” (sacarse las mentiras es una forma de decir tronarse los dedos).

Más allá de esto, abundan teorías de todo tipo. “Algunos autores dicen que podría generar una elongación repetitiva de los ligamentos y eso podría traer lesiones a futuro, pero no está demostrado”, señaló Palleiro. También resaltó que la hiperextensión forzada de la articulación no está descrita como factor de riesgo de la artrosis: “Si a uno le tocará tener una artrosis la tendrá por genética o por alguna otra circunstancia, no por haberse sacado las mentiras”.

Así como no está bien ni mal que las articulaciones suenen, tampoco pasa nada si no lo hacen. “Va mucho en la conformación psíquica de la persona; hay quiénes están más pendientes de si hace ruido o no”, comentó.

Cómo cuidar la salud articular.

Para mantener sanas las articulaciones, es importante moverse. Beretervide recomendó ejercicios de movilidad articular; por ejemplo, rotaciones de tronco (de pie, girar la columna hacia un lado y hacia el otro), movimientos circulares de- brazos, muñecas y tobillos lo más amplio posible, y estiramiento de columna (de pie, llevar las manos hacia los pies y luego hacia arriba, lo más alto que se pueda) y de rodillas (sentado, flexionar y estirar las rodillas). Aconsejó realizar dos o tres series de diez repeticiones cada una.

Otras opciones son las actividades de hidrogimnasia o de flexibilidad, señaló. No obstante, destacó que es igual de importante fortalecer los músculos porque éstos dan estabilidad a las articulaciones. Sirve levantar pesas, pero no es la única alternativa: también están los aparatos que generan resistencia, las poleas, las bandas elásticas, e incluso los ejercicios con el propio peso corporal.

A su vez, la actividad física regular ayuda a mantener un peso adecuado y eso es fundamental porque el sobrepeso daña las articulaciones. En la misma línea, Palleiro resaltó que es clave combatir el sedentarismo, y afirmó: “La salud de la articulación es el movimiento”.

También hizo hincapié en la importancia de fortalecer los músculos: “Los trastornos que pueden aparecer en la adultez, como inestabilidad en la marcha o artrosis, pueden llevarse mucho mejor con un buen tono muscular”. Otro consejo es el de usar calzado adecuado al salir a caminar, es decir, con cámara de aire que amortigue el impacto sobre el piso, indicó.

Aún hay más: los cuidados posturales. “A veces, el uso del celular genera una sobrecarga a nivel de las articulaciones de la mano”, señaló, y añadió que también hay que cuidar la forma en la que uno se sienta frente a la computadora. Además, recomendó evitar la sobrecarga; por ejemplo, en niños y adolescentes, cuando llevan mochilas con pesos disparatados a la escuela o al liceo. “Hay que tratar de ir alivianado por la vida y cargar con lo que uno puede cargar”, remarcó.

Por último, subrayó la importancia de la consulta precoz con el reumatólogo: “Hay un concepto de que el reumatólogo ve viejos, y está mal. Vemos gente de todas las edades”.

Ejercicio adultos
Adultos haciendo ejercicio.
Foto: Freepik.

Curiosidades y casos en los que el ruido articular puede ser un problema.

Otra cuestión interesante sobre los chasquidos de las articulaciones es que uno no puede hacerlos durante diez minutos de corrido. El doctor Palleiro expuso que, para algunos autores, esto ocurre porque se producen gases dentro de la articulación y son esas sustancias en estado gaseoso las que dan lugar a los chasquidos por hiperextensión. “Después, la sustancia vuelve al estado líquido y es por eso que uno no puede sacarse las mentiras una y otra vez sin parar. Capaz que sale una o dos veces, pero tres ya es difícil, y hasta dentro de 10 o 20 minutos no lo puede repetir”.

Los chasquidos articulares no necesariamente están ligados a una enfermedad. Sin embargo, cuando hay dolor y/o limitaciones de movimiento, su origen sí puede ser patológico. El reumatólogo explicó que la artrosis genera cuerpos extraños que quedan dentro de la articulación y, a veces, puede generar un bloqueo que deriva en un ruido articular. También, hay casos —llamados “dedos en resorte” o “dedos en gatillo”— donde existe un problema tendinoso: “El tendón flexor que flexiona los dedos queda atrapado dentro de su vaina, entonces el paciente puede doblar el dedo, pero no estirarlo, y a veces hace fuerza para estirarlo y zafa, y eso causa un ruido”.

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