Gracias a ellos podemos caminar, correr y bailar. También nos llevan a donde queramos ir. Sí, estamos hablando de los pies. Extremidades que cuentan con 26 huesos, 33 articulaciones, 19 músculos y más de 100 tendones y ligamentos. Para protegerlos, debemos tener ciertos cuidados.

Muchas veces, el cansancio luego de una larga jornada no nos permite darles la atención que merecen. Por esto, es necesario cultivar el hábito de invertir tiempo en el cuidado de los pies para que puedan permanecer sanos y libres de infecciones, durezas y callosidades.

Lo primero que debemos hacer para cuidar los pies es mantenerlos hidratados. Siempre que apliquemos crema sobre ellos, podemos realizar masajes en los dedos y las plantas.

También es importante asearlos diariamente para evitar malos olores. Hay que lavar adecuadamente tobillos, plantas, uñas y espacios entre los dedos, así como eliminar el exceso de jabón y agua, sino podrían generarse hongos y bacterias.

Además, es importante que las uñas no crezcan en exceso. Hay que cortarlas siempre de forma recta/cuadrada para evitar que produzcan problemas al crecer.

Usar medias de materiales naturales como el algodón ayuda a que los pies respiren y no se vean afectados por costuras o materiales sintéticos.

Esto mismo ocurre con el calzado. Es importante que el calzado sea flexible, transpirable, de anchura adecuada a tus pies y cómodo. Son preferibles aquellos que tengan una planta acolchada para evitar sobrecargar los pies. Los tacones altos y estrechos deben evitarse mientras sea posible.

Por último, es saludable ejercitar los pies constantemente, realizando estiramientos, girando los tobillos y moviendo los dedos siempre que se pueda.

(Por El Tiempo GDA)