En base a El Tiempo / GDA
Una discusión que no encuentra fin. ¿Los hombres deberían orinar de pie o sentados? Por higiene, por salud, por comodidad, por costumbre... los argumentos a favor y en contra de cada una de las opciones se vienen apilando y lo cierto termina siendo que la resolución al dilema la encuentra cada uno, a puertas cerradas.

Según el portal web del Grupo Urológico del Hospital San Rafael de Madrid, en España, aún sigue vigente y latente la creencia de que lo natural es que una persona con pene orine de pie. Sin embargo, varios estudios demuestran que orinar sentado no solo trae beneficios para la salud masculina, sino que además, ayuda a mejorar la vida sexual. Esto sucede porque la próstata está más relajada, explican los expertos del servicio de urología del Hospital San Rafael.

Varios sitios especializados afirman que la posición del cuerpo puede influir significativamente en el volumen de flujo de orina. Esto ocurre por la capacidad fisiológica de la vejiga urinaria entre los 250 y los 300 centímetros cúbicos. Lo anterior significa que para vaciar completamente la vejiga “se necesita tener intacto el sistema de control nervioso, que alerta cuándo hay que orinar y que retiene la orina hasta que la persona se encuentre en un lugar para evacuar. Una vez en esas circunstancias, se relajan el esfínter de la vejiga y los músculos del suelo pélvico, al tiempo que la vejiga se contrae y se vacía”, sostiene el hospital ya mencionado.

El departamento de Urología del Leiden University Medical Center, de Países Bajos, sostienen que cuando un hombre orina sentado no se tensionan los músculos de la vejiga, lo que ayuda a evitar, precisamente, problemas de próstata. Además, entre otras ventajas, es más higiénico porque no se salpica el retrete, y se reduce el riesgo de sufrir una infección.

Por otro lado, un estudio publicado en el semanario científico Plos One confirma que sí es más saludable hacerlo sentado, pero solo entre aquellos que tienen la próstata inflamada. “Al estar sentado se relaja la musculatura del suelo pélvico y entonces mejora el flujo”, contó el doctor Luis Resel Folkersma, de la Asociación Española de Urología.

El País de Madrid cita a la especialista en Urología Funcional en Lyx Instituto de Urología, Almudena Coloma del Peso, quien asegura que aunque hay algunos estudios al respecto que han evaluado las diferencias en cuanto a flujo miccional entre orinar de pie y sentado en los varones, los resultados no son claros.

“Según algunos estudios, parece que el flujo miccional podría ser mejor estando de pie para los varones que orinan de esta forma de manera habitual. En caso de pacientes con síntomas miccionales secundarios a hipertrofia prostática parece que es beneficioso hacerlo sentados. En las mujeres se recomienda orinar sentadas, dado que cuando no orinan de esta forma, se ven obligadas a hacerlo en cuclillas, lo que supone hacerlo en tensión, y no se permite una buena relajación del suelo pélvico. Pero esto no parece ser un problema en el caso de los varones, debido a que la disposición de su aparato urinario permite realizarlo de pie en una posición relajada”, explica la doctora.

Pese a esto, la especialista señaló que un momento oportuno para dejar de orinar de pie es “a partir de los 50 años, cuando los problemas prostáticos hacen que la orina salga más dispersa y con menor fuerza, es más difícil dirigirlo hacia el interior del inodoro si el hombre está de pie”.

Por su parte, Anastasia Téllez, antropóloga, directora del Observatorio de las Masculinidades de Elche y del Postgrado de Especialista Universitario en Masculinidades, Género e Igualdad, dijo al medio español algo que tiene que ver con las costumbres sociales, tan arraigadas: cualquier hombre se negará a orinar sentado en un baño público por motivos de higiene y por una pura cuestión de arquitectura: en los baños de hombres hay urinarios, siempre más disponibles, cómodos y rápidos que el inodoro.