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El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fue sometido a una cirugía de cabeza en la madrugada del martes en el Hospital Sírio-Libanês de São Paulo. Según el parte médico, la cirugía transcurrió sin incidentes y el presidente se recupera en cuidados intensivos. El procedimiento al que se sometió el presidente se llama craneotomía y se utiliza para aliviar la presión dentro del cerebro cuando se forma un coágulo.

En este procedimiento, se extrae temporalmente parte del cráneo para permitir el acceso al cerebro. Esta cirugía se realiza para tratar diversas afecciones neurológicas, como tumores cerebrales, traumatismos craneoencefálicos, hemorragias intracraneales, aneurismas, entre otras. En el caso del presidente, el trauma fue provocado por una caída, en octubre, en el baño del Palacio de Alvorada.

1. Anestesia: El paciente suele ser sometido a anestesia general, aunque en algunos casos la craneotomía se realiza con el paciente despierto, especialmente en cirugías que involucran áreas del cerebro relacionadas con el habla o el movimiento.
2. Incisión y extirpación de hueso: el cirujano realiza una incisión en el cuero cabelludo y utiliza herramientas específicas para cortar y extirpar una sección del cráneo, llamada "colgajo óseo".
3. Acceso al cerebro: Después de extraer el hueso, se abre la membrana que rodea el cerebro (duramadre) para que el cirujano pueda tratar directamente el problema.
4. Reemplazo óseo: después de la cirugía cerebral, el colgajo óseo se reposiciona y se fija con placas o tornillos.

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El tiempo de recuperación varía según la complejidad de la cirugía y el estado de salud del paciente. Para una recuperación completa, y en algunos casos, el paciente puede requerir rehabilitación neurológica para recuperar funciones motoras o cognitivas.

En el período inmediato posterior a la cirugía, el paciente es monitoreado en un ambiente hospitalario para control de signos vitales, manejo del dolor y evaluación neurológica. Se recomienda la movilización temprana para prevenir complicaciones, mientras que el cuidado del lugar de la incisión es esencial para evitar infecciones.

Después del alta, el seguimiento médico y la rehabilitación desempeñan un papel central en el proceso de recuperación.

Según el boletín oficial, Lula estuvo en el hospital de Brasilia el lunes por la noche con dolor de cabeza. “La resonancia magnética mostró hemorragia intracraneal, producto del accidente domiciliario sufrido el 19 de octubre”, afirma el hospital.

Luego, el presidente fue trasladado al Hospital Sírio-Libanês, en São Paulo, "donde fue sometido a una craneotomía para drenar un hematoma". "La cirugía transcurrió sin incidentes. Por el momento, el Presidente se encuentra bien, bajo seguimiento en una cama de UCI", afirma el boletín.