Redacción El País
La inflamación del hígado, también conocida como hepatitis, puede ser causada por diversas razones. Existen varios tipos de hepatitis, siendo las más comunes la A, la B y la C. Prevenir la inflamación del hígado es fundamental para mantener este órgano tan importante en buen estado de salud.
1. Seguir una dieta saludable
Una de las formas más efectivas de prevenir la inflamación del hígado es llevar una alimentación saludable y equilibrada. Los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) apuntaron que es importante evitar el consumo de grasas saturadas y trans, presentes en alimentos como las comidas rápidas, frituras y alimentos procesados. En su lugar, se recomienda optar por alimentos ricos en fibra, como frutas, verduras y granos integrales, indicó Mayo Clinic.
2. Limitar el consumo de alcohol
El alcohol es uno de los principales factores que contribuyen a la inflamación del hígado, con la llamada hepatitis alcohólica, según consignó la entidad médica. El consumo excesivo y prolongado de alcohol puede provocar daño hepático a largo plazo e incluso cirrosis. Para prevenir la inflamación del hígado, se recomienda limitarlo o, en casos de consumo excesivo, considerar la abstinencia total.
3. Evitar el contacto con toxinas
Para prevenir la inflamación del hígado, es importante evitar el contacto con sustancias tóxicas, como productos químicos agresivos, pesticidas y productos de limpieza, para no sufrir de hepatitis tóxica. Asimismo, se debe tener cuidado al manipular medicamentos y suplementos nutricionales, siguiendo siempre las indicaciones del médico.
4. Mantener un peso saludable
La obesidad y el sobrepeso son factores de riesgo para la inflamación del hígado. Las personas con sobrepeso tienen más probabilidades de desarrollar hígado graso, una condición que puede conducir al desarrollo de una esteatohepatitis no alcohólica (NASH, por sus siglas en inglés), que se caracteriza por la inflamación hepática. Para prevenir esta afección, se recomienda mantener un peso saludable a través de una alimentación equilibrada y la práctica regular de ejercicio físico.
5. Vacunarse contra las hepatitis virales
La hepatitis A y la hepatitis B, enfermedades virales que provocan la inflamación hepática, tienen vacunas para prevenirlas. Es importante vacunarse de acuerdo con lo estipulado en el esquema nacional de vacunación.
6. Asistir periódicamente a consultas médicas
Realizar chequeos médicos periódicos es fundamental para detectar cualquier problema hepático en sus etapas iniciales. Un médico puede realizar pruebas de función hepática y otras pruebas específicas para evaluar la salud del hígado. En caso de detectar alguna alteración, se podrán tomar las medidas adecuadas para prevenir o tratar la inflamación del hígado.
El diagnóstico de la hepatitis se realiza mediante un conjunto de análisis de sangre que detectan la presencia de los virus y evalúan la función hepática, según indicó MedlinePlus.
Este contenido fue hecho con la asistencia de inteligencia artificial y verificado por un periodista de El País.